PROLOGO: DE INICIACIÓN A LA MAGIA...DE LA LECTURA.
Para mi las sagas literarias de Harry Potter y "Canción De Hielo Y Fuego" tienen algo en común. En ambos casos decidí disfrutarlas en primer lugar en sus versiones fílmicas antes de lanzarme en picado sobre los libros. ¡ABERRACIÓN, ABERRACIÓN! ¡"PENITENCIAGITE"! ¡A LA HOGUERA! ¡QUE LE CORTEN LA CABEZA! Bueno bueno...estoy seguro de que no soy el único ávido lector que se ha visto en un dilema semejante. Sobre todo en lo que respecta a la ya mencionada historia de Poniente y sus guerras por el Trono de Hierro. George R.R. Martin debe estarme enormemente agradecido por esta decisión. Con lo que tarda este hombre en publicar sus libros, y la tremenda adicción que siento por su obra, hace tiempo que le habría enviado unos sicarios armados con resmas de folios y un par de máquinas de escribir "Olivetti".
Aunque tengo ambas sagas en mi estantería mirándome de manera desafiante, aún no me he puesto a ello, la cola de libros pendientes es larga. No pierdo la esperanza de que mas tarde o mas temprano me ponga a desgranar cada página de estos dos grandes relatos que nuestra generación ha tenido la fortuna de vivir.
De todas maneras quiero comentaros que en lo que respecta a la saga del niño "que sobrevivió" casi podríamos decir que la he leído una y mil veces.
Tras años de batalla campal con mi hijo para que se aficionara a la lectura, un buen día, sin que este vuestro servidor dijera palabra alguna, "aquella por la que bebo los vientos", le puso entre las manos "Harry Potter Y La Piedra Filosofal"...y ocurrió el milagro.
Uno por uno los libros de J.K. Rowling fueron total y absolutamente devorados por él. Y si os digo que prácticamente fue como haberlos leído personalmente, se debe a que desde que acabó la primera novela, fue como vivirla a través de su mente e imaginación. Los videojuegos se echaron a un lado como tema principal de conversación, para dejar paso triunfal a las mil y una historias que tenían lugar entre los muros de ese maravilloso colegio llamado Hogwarts.
De sus labios salían atropelladamente aventuras, nombres de personajes y hechos que ampliaron mis conocimientos. Algún destripe se le escapó, eso sí, por entonces no todas las películas habían llegado a nuestras pantallas, pero bueno, eso era lo de menos. Lo importante es que entre mi mujer y J.K. Rowling consiguieron que al fin viera a mi hijo sentado en un sillón leyendo hasta que le ardían las orejas.
Entre nuestros debates mas "encendidos" el que mas recuerdo fue el que se inició con la pregunta: "Papá, para ti ¿cual es la mejor película de Harry?" Él siempre lo ha llamado así, Harry, como si en realidad estuviera hablando de un amigo en lugar de un personaje de ficción.
Para él la respuesta estaba clara: "La Cámara De Los Secretos".
Para mi era cristalina: "El Prisionero de Azkaban" y hasta la fecha no he cambiado de opinión. Ni él tampoco.
CAPITULO I: DE FAMILIAS MALIGNAS Y REENCUENTROS
Para Harry este verano está siendo horrible, nada extraño por supuesto. Tener que pasar las vacaciones con sus tiránicos tíos y su insoportable primo es un verdadero suplicio. Él es feliz en Hogwarts: convivir con sus amigos Hermione y Ron, visitar a Hagrid en su cabaña y que les cuente historias sobre animales fantásticos, jugar al Quidditch y por supuesto practicar magia.
La situación en casa es tan insostenible que un buen día Harry decide dar una lección a la hermana de su tio Vernon, la tia Marge, tan malvada como el resto de su familia adoptiva, lanzándole un hechizo para posteriormente huir de la casa.
Hacer magia fuera de las paredes de Hogwarts está terminantemente prohibido. Podrían expulsarlo del colegio. Su huida le lleva a toparse por primera vez con el "Autobús Noctámbulo", un medio de transporte invisible que solo pueden usar los magos. Este le lleva hasta una posada en Londres llamada "El caldero mágico". Allí se enterará de que su verdadero mundo, el de la magia, está convulso por un terrible suceso.
Sirius Black, prisionero de Azkaban, cárcel donde van a parar los magos malvados, ha escapado. Y no solo eso, esta buscando a Harry para vengarse, pues según cuentan fue uno de los mas fieles seguidores de Lord Voldemort.
Tras reunirse en la taberna con sus amigos Ron y Hermione, juntos tomaran de nuevo el tren con destino a Hogwarts e iniciar así el tercer curso, esta vez bajo la amenaza de ese siniestro y malévolo Sirius Black. Esto dará lugar a que Hogwarts deba ser custodiado por los DEMENTORES, unos tenebrosos seres encargados de la vigilancia de la prisión de Azkaban.
La amenaza de Sirius sobre Harry es inminente, y la presencia del niño en el colegio un verdadero peligro tanto para él mismo como para el resto de alumnos y profesores.
Pero parece ser que tanto en la vida de los muggles como en la de los magos las cosas no siempre son como parecen. No tardaran nuestros protagonistas en aprender esto cuando los acontecimientos den un vuelco y muchas cosas que daban por supuesto queden echados por tierra.
CAPITULO II: DE TINIEBLAS Y OSCURIDADES
Si he convertido esta película en mi predilecta sobre la vida y milagros de Harry, se debe a que la considero un punto de inflexión en el desarrollo de toda la historia. Hasta entonces se le podía atribuir a la saga un toque mas o menos infantil, pero ahora todo adquiere un tono mas adulto, mas oscuro. Si en "La Piedra Filosofal" el inicio del camino del héroe era una promesa, aquí se convierte en un hecho. Por primera vez comprobamos no solo que Harry es "humano", capaz de sentir ira e incluso odiar, sino que además nos damos cuenta de que ese camino que tiene por delante va a estar repleto de espinas a las que poco les va a importar que el sr. Potter sea tan solo un niño.
Y que mejor director para plasmar esta oscuridad que Alfonso Cuarón, relevo del en ocasiones demasiado familiar Chris Columbus, encargado de dirigir las dos primeras entregas.
Cuarón viste la cinta de un tenebrismo hasta entonces inédito y lo hace de tal forma que tanto Hogwarts como el resto de los escenarios por los que se mueven nuestros protagonistas, y que ya nos eran conocidos, parecen ahora "diferentes", mas cerrados y angustiosos.
No solo esto la convierte en mi favorita. Se trata de la historia que nos cuenta, tan oscura como el papel que la envuelve:Nuestro trío protagonista esta comenzando a madurar, poror primera vez vemos a los "Dementores", guardianes de Azkaban y dignos herederos de los "Nazgul" de "El Señor De los Anillos" y que lanzándose sobre ti son capaces de robar tu personalidad con tan solo mirarte.
UN DEMENTOR EN SUS FUNCIONES
Y por supuesto el reparto. Si algo ha caracterizado a esta saga es que siempre ha contado con un magnifico elenco de actores...pero es que en esta ocasión hemos de sumar a estos señores de aquí abajo:
SIRIUS BLACK (GARY OLDMAN)
PROFESOR LUPIN (DAVID THEWLIS)
SIBYL TRELAWNEY (EMMA THOMPSON)
De entre estas nuevas incorporaciones, me quedo con Gary Oldman, actor al que se le ha acusado en varios ocasiones de histrionismo y sobre actuación pero con el cual he venido disfrutando desde que lo vi por primera vez en "Leon, el profesional". Su aspecto y condición como Sirius Black te hace temer lo peor para el bueno de Harry y aun así se echa en falta que aparezca en más secuencias...
Y como no, esta tercera entrega será recordada también por no contar ya con el actor Richard Harris como el profesor Albus Dumbledore. El actor que aceptó el papel del entrañable profesor tras la insistencia de sus nietos, fans de la saga, falleció en el 2002, mismo año del estreno de "La Camara Secreta". Su papel pasó a ser interpretado por Michael Gambon, que cumple perfectamente, peroooo.....se echa de menos a nuestro primer Albus....es inevitable.
RICHARD HARRIS Y MICHAEL GAMBON
CAPITULO III: DE ADULTOS, ADOLESCENTES Y NIÑOS
Pocas veces viviremos en esta generación un camino del héroe como este. Desde que se publicó el primer libro en 1997, hasta que vio la luz la ultima película, 2011, han pasado...a ver a ver...me llevo una, le sumo dos...14 años.
Durante todo ese tiempo Harry y sus amigos, Ron y Hermione han crecido junto a nosotros. Han formado parte de nuestra vida llenándola de hechizos con nombres maravillosos, criaturas fantásticas y nos han mostrado a un ser cruel y malvado para la historia. Mas de uno hemos llamado a cierta persona, jefe o compañero de trabajo "EL QUE NO MERECE SER NOMBRADO", no iréis a decirme que no...
Me gusta pensar en ese niño que realmente ha crecido con ellos. Ese niño de 10 años que en 1997 puso sus manos sobre un libro que hablaba de un niño como él. Solo que este tenía una cicatriz en forma de rayo sobre la frente y poderes mágicos. Y desde la palabra "fin" no pudo vivir sin tener en su regazo el siguiente libro de la saga.
Me gusta imaginar a ese niño en el 2011, ya con 24 añazos, sentado en la butaca del cine para ver como finalizaba en la pantalla la gran aventura de ese niño con el que tantas alegrías y desvelos vivió, ahora convertido en un adolescente...como él.
Eso si que debió ser MÁGICO.
MAGIA de la de verdad.
Y aunque esta indudablemente no tiene edad...
¡¡Por todos los muggles del mundo!!...como me hubiera gustado ser ese niño...
Fuente: este post proviene de The DVAS Blog, donde puedes consultar el contenido original.
¿Vulnera este post tus derechos? Pincha aquí.
Creado: