Aquí la escritora, E.L. James (sobrenombre de Erika Mitchell) tenía varias opciones: sentarse a disfrutar de su éxito y considerable fortuna mientras espera las siguientes adaptaciones al cine de su saga, o escribir una nueva novela aprovechando su tirón.
Pero al parecer la creatividad de la autora está en horas bajas, porque su jugada consiste en publicar una nueva trilogía de novelas... titulada Grey.
Efectivamente, los seguidores de la saga podrán "disfrutar" de la misma historia desde el punto de vista de Christian Grey. Y cuando el interés de la historia original era precisamente el descubrimiento de la parte sexual de Grey por parte de la inocente Anastasia, nos tememos que la misma historia contada él puede ser aún más de lo mismo.
Sin duda, una estrategia basada en la explotación comercial de la saga que no sabemos si logrará contentar a los seguidores o aburrirlos definitivamente de esta pseudo-historia de amor con tintes sexuales.