Escocia en 10 días: Día 2 de Glasgow a Fort William

Hace un par de años, justo el verano antes de la pandemia hicimos uno de los viajes que más ganas teníamos de hacer y que quien sabe porque habíamos ido posponiendo.

El 2019 fue el año de hacer por fin una ruta por Escocia en 10 días, en nuestro caso, quisimos combinarlo con un viaje a Londres, ciudad que aunque ya habíamos estado varias veces, queríamos volver para ir a visitar los estudios de Harry Potter e incluir además Oxford, Cambridge y Liverpool que fue dónde recogimos el coche y comenzamos nuestra ruta en coche por Escocia.

Después de haber estado en bastantes sitios, tengo que reconocer que ha sido uno de los viajes que más me han gustado, porque Escocia es realmente asombrosa, salvaje y preciosa, sino fuera por el tiempo… eso sí.

Para recorrer Escocia un buen punto de partida es Glasgow y luego terminar en Edimburgo, en el post Que ver en Glasgow en un día, tienes una guía completa con mapas y dividida por zonas para que organices tu visita.

Ruta de Glasgow a Fort William

Es el primer día de ruta, salimos de Glasgow dirección a Fort William dónde dormiremos la primera noche.

Distancia: 172 km

Ya desde aquí empezaremos a ver alguno de los paisajes más bonitos de Escocia, si te gusta el senderismo también vas a encontrar varias rutas como la de Beinn Dorain o la de Sgorr Dheard, en el Centro de Visitantes de Glencoe te pueden dar información si te interesa.

Loch Lomond

La primera parada desde Glasgow es Loch Lomond, situado en el sur de la High Lands, es un lago de origen glaciar y es uno de los lagos más bonitos de Escocia, y decir eso en Escocia que tiene lagos impresionantes es mucho decir.

Nosotros decidimos hacer un crucero por Loch Lomond, reservamos con la empresa Sweeney’s Cruise, puedes comprar los billetes online y así te aseguras que tienes sitio.

Aunque sea verano, (allí descubrimos que el verano escocés se parece muchísimo al invierno en Madrid…) te aconsejo que te abrigues porque las temperaturas son bajas y en mitad del lago, en un espacio tan abierto y con aire más aún.

El paseo es super bonito, las vistas espectaculares y es una buena forma de tomar contacto con las tierras escocesas.

Si te decides a hacer el crucero hay un aparcamiento abierto dónde dejar el coche, justo dónde se coge el barco.

Que ver desde Loch Lomond hasta Glencoe

La carretera que va hacia Glencoe desde Loch Lomond está repleta de paradas, lo mejor es dejarse llevar e ir parando dónde más os guste, que si te pasa como a nosotros, vas a parar muchas veces porque es todo precioso.

A pesar de que no luce mucho el sol y que llueve casi de forma constante, es precisamente esa luz y ese ambiente lo que hace todo esto tan bonito, especial y yo diría que mágico.

Falls of Falloch

Estas son las paradas que nosotros hicimos, en la mayoría de los sitios, dejas el coche en un lado de la carretera y ya está, no suele haber aparcamientos o son pequeñas entradas en la carretera.

Rannoch Moor

Falls of Falloch: Preciosa cascada que forma parte del Parque Nacional de The Trossachs, es un buen sitio para un picnic.

Loch Tulla Viewpoint: Unas vistas espectaculares de Loch Tulla, de las más bonitas, por eso es una parada tan popular, hay un parking muy grande donde dejar el coche.

Rannoch Moor Viewpoint: Desde este mirador se puede ver toda la zona del páramo de Rannoch, es un sitio increíble.

Stob Dear Viewpoint: El Stob Dear es el pico más alto de Buachaille Etive Mor, la montaña que da paso a Glencoe, desde aquí se puede ver perfectamente.

Glencoe

Este valle es impresionante, es como si lo hubieran sacado de una pintura de tan irreal que parece, cuando el sol aparece entre las nubes y lo ilumina, te quedas como hipnotizado.

No soy capaz de describir un sitio como este, porque no hay palabras, la vista se pierde entre las montañas y te invita a seguir sus senderos para descubrirlo.

Según vayas avanzando con el coche, querrás ir parando en cada rincón de esa carretera de doble sentido que recorre todo el valle, no te cortes porque es una gozada.

Hay un montón de rutas de senderismo, con diferentes grados de dificultad, en Walkhighlands puedes ver que rutas hay y en el Centro de Visitantes también te pueden dar información.

Es quizás de los sitios que más nos gustaron (y nos gustó todo mucho) junto con la Isla de Skye.

Fort William

La montaña más alta de Reino Unido es el Ben Nevis con sus 1.345 metros, y Fort William es el sitio más cercano a ella.

Desde aquí puedes llegar fácilmente a los diferentes senderos que te llevan a la cima de la montaña.

Aunque lo tuyo no sea el alpinismo (lo nuestro tampoco), es un sitio perfecto para pasar la noche.

Fort William es una pequeña ciudad con mucho ambiente, llena de pubs y restaurantes y con bastante afluencia de público, es muy recomendable reservar sitio para cenar, porque se llena y no hay forma de encontrar un buen sitio.

Si tienes tiempo y te interesa la historia escocesa, que es apasionante, puedes visitar el Museo West Highlands, que además es gratuito, nosotros no pudimos porque llegamos tarde y ya estaba cerrado.

En Fort William se encuentra el Old Inverlochy Castle, como otros muchos castillos de Escocia se encuentra en ruinas, pero este castillo ha sido uno de los más importantes de la historia de Escocia, ya que fue parte importante de la Batalla de Inverlochy que tuvo lugar en 1645.

Donde dormir en Fort William

Nosotros elegimos para dormir el Hotel Factor’s Inn and Cottage, está situado a las afueras de Fort William, la habitación que teníamos era muy grande, con dos cuartos de baño, y una cama comodísima y enorme, tiene aparcamiento al exterior gratuito dónde dejar el coche.

Muy recomendable y muy bien de precio.

Super tranquilo y silencioso, hay varios tipos de habitación, en nuestro caso elegimos en la posada, que es un edificio independiente, no tiene recepción, el check-in hay que hacerlo en la recepción del hotel Inverlochy Castle, un hotel precioso pero que si nos iba de precio, eso sí, si te quieres dar un capricho es una pasada.

El desayuno lo hicimos en el hotel, y nos sentimos como reyes, tanto por el desayuno en si, como por el entorno.

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