Debo decir que Xel-ha ha sido uno de los lugares más increíbles de los que hemos disfrutado, no sólo por la cantidad de actividades que tienen sino también por la maravillosa vista que ofrece, creando un verdadero paraíso terrenal.
El lugar no es ni barato ni caro son unos $1400 pesos, pero es menos si compras la entrada dos semanas antes o con anticipación. El precio consideramos que está bien debido a que el paquete te incluye todo (excepto el nado con delfines ni manta rayas, ni el zip-bike el cual no recomiendo es un poco aburrido porque es algo lento, además de que te diviertes más con las actividades que te ofrece el paquete, pero pues ya es opcional) lo que necesitas para divertirte sin gastar ni en comida ni bebidas dentro del parque, así como tampoco en el equipo de snorkel, sólo dejas un anticipo, pero eso te lo regresan al devolver el equipo.
En cuanto al bloqueador o bronceador debes llevar uno biodegradable, (el cual puedes comprar con tu guía de tour o dentro del parque) porque puedes dañar o matar a las especies de la reserva. Recuerda que aunque Xel-ha es un parque acuático, también es responsable de la sustentabilidad de las especies que ahí habitan. Así que, por favor póngamos de nuestro granito de arena y hay que ayudar a preservarlas, en este caso utilizando productos biodegradables.
Antes de querer nadar y explorar el parque debes ir al módulo más cerca a que te den tu llave de casillero para que te cambies, hay muchísimos módulos, pero encuentra el que esté más céntrico de restaurantes, ya que podrás ir por tus cosas más rápido y estás cerca tanto de la comida como de las atracciones en caso de que necesites algo de tu casillero.
¿Qué hacer en Xel-ha?:
El río de manglares el cual recorres en unos sillones inflables. Tienes que usar tu chaleco salvavidas (en esta y en las tirolesas) porque sueles caerte si no estás bien acomodado en el sillón, en mi caso pues sí lo necesitaba porque no sé nadar, así que me hizo sentir segura hahahaha. Ten cuidado con los que van andando con equipo de snorkel porque tu sillón sólo va a chocar con ellos, pero igual es divertido.
Las tirolesas, ya sea sujetado de manos o sentado son increíbles y divertidas. Cada vez que recuerdo esto me acuerdo que mi marido utilizó la tirolesa de manos y no tenía su chaleco bien asegurado, así que al caer al agua, el chaleco se le infló hacia arriba y no podía nadar ni ver, fue muy gracioso, por eso abróchate bien el chaleco para que te ayude a salir hacia arriba después del chapuzón.
El trepachangas, es sin duda en reto, son dos cuerdas: una abajo y otra arriba a lo largo del camino, debes tener equilibrio para poder cruzar al otro lado del agua, también concentración porque cuando todos se suben para intentar cruzar muchos se caen al agua y mueven las cuerdas, también muchos las mueven apropósito para poderle más dificultad y te caigas. Pero sin duda es divertido.
La piedra del valor es ideal para probar tus clavados y aventarte de forma libre al agua para refrescarte. Lo único es que tienes que esperar tu turno ya que muchos también quieren aventarse.
Disfrutar de caminar por los caminos selváticos que ofrece el lugar, es muy bonito y te hace sentir como un verdadero explorador, además de que te vas a ir descubriendo el resto de las actividades que sin duda vas a querer probar antes de seguir caminando, como los cenotes, o el puente flotante que sin duda es uno de los primeros que te encuentras al recorrer el parque, y que al cruzar por él, es muy divertido debido a la sensación que da.
Para los niños tienen sus propias actividades para que se diviertan a lo grande en el Mundo de los niños, en donde tienen sus propios colgantes y actividades artísticas como pintura y dibujo.
De la comida puedes disfrutar en cualquier momento, desde que abren el parque hasta que lo cierran, debo mencionar que el menú tipo buffet es muy amplio y muy rico desde comida italiana, mexicana, carnes y mariscos, así como de las bebidas, las cuales pueden ser alcohólicas como cocteles o cervezas, así como las que no tienen nada de alcohol como jugos o refrescos. Los postres son deliciosos, tienen desde pasteles hasta gelatinas o máquinas de helados en donde puedes servirte cuántas veces quieras. Todo esto incluido en tu entrada del parque.
Las fotos que te venden dentro del parque son muy caras, y no suelen salir muy bien porque te las toman cuando menos te lo esperas, así que es mejor que lleves tu propia cámara y la protejas con algún estuche a prueba de agua. Al final tomarás las fotos que quieres y cómo quieres, siendo mucho mejor.
Y al final terminamos bien cansados y bien llenos pero antes de irnos descansamos en las hamacas que ofrecen una maravillosa vista al mar, totalmente relajante.
No te pierdas de visitar Xel-ha en tu próxima visita que hagas ya sea a Cancún o a toda la Riviera Maya.
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Fuente: este post proviene de Blog de AlejandraLP, donde puedes consultar el contenido original.
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