Para mi hay una serie de puntos clave que deben cumplir: estar céntricos o tener buenas conexiones con los transportes de la ciudad (especialmente en viajes de pocos días), la limpieza, que no haya problemas de ruido y que el baño esté bien.
Después de analizar varias opciones, para nuestra estancia en Roma el pasado diciembre escogimos el Hotel Lírico y fue un acierto, así que os lo recomiendo si pensáis hacer un viajecito a esta maravillosa ciudad.
Está muy cerca de la estación de Términi, donde nos dejó el autobús que cogimos en el aeropuerto (os dejo el enlace a mi post donde hablo de los traslados desde los aeropuertos aquí). Por esta zona parece ser que hay alguna calle muy ruidosa y de mal ambiente, pero no era así en la que estaba nuestro hotel, justo al lado de la Opera de Roma, y muy cerquita de algunas de las avenidas principales de la ciudad.
Para acceder al hotel, una vez entramos en el portal, hay que subir unas escaleras empinada. Una vez dentro, las habitaciones están muy bien, si no nos fijamos mucho en la decoración que no era nuestro estilo, todo lo demás estaba perfecto. La calefacción funcionaba perfectamente, algo muy importante para visitas en el mes de diciembre, la cama era comodísima, no se escuchaba ningún tipo de ruido, el baño estaba reformado y siempre nos encontrábamos la habitación perfectamente limpia y arreglada.
Además este hotel incluía desayuno, que estaba bastante bien, y el personal era muy agradable.
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