A tener en cuenta:
Copenhague es caro no, lo siguiente. Tomarte un café y un bollo (muy ricos, eso sí) puede costarte unos 15 euros por pareja, así que nosotros combinábamos y si un día gastábamos más, al día siguiente nos cortábamos un poquito. Eso sí, yo prefiero comer bien y ahorrar en otras cosas…
Los daneses comen y cenan muy pronto. Es horario europeo llevado al máximo por el tema de aprovechar las horas de sol, así que tener en cuenta que tenéis que comer en torno a las 12h-13h y cenar sobre las 18h-19h…
Las comidas son pequeñas, y se contentan con un sándwich. Allí es muy famoso el Smorrebrod, que es una rebanada de pan con diferentes ingredientes encima. Si tenéis la ocasión de probarlo, está muy rico.
Dónde comer:
Distrito de la carne (The Meatpacking District): En el barrio de los hipsters de Copenhague se encuentra esta maravilla que no te puedes perder si eres un buen carnívoro. Zona de despiece y de degustación, ideal para degustar la carne de allí y disfrutar de un ambiente estupendo tanto de día como de noche.
Meyers Deli: Recomendada como una de las mejores pastelerías en las que desayunar. Recomiendo reservar (puedes hacerlo por Internet).
PapiroEn: Los food trucks y los street markets que están ahora tan de moda concentrados en una antiguo almacén del puerto de Copenhague. Buena comida, buena música y muy buen ambiente se unen para que disfrutes de algunas delicatessen del país pero también de otras muchas nacionalidades. Eso sí, ármate de paciencia porque hay gente para aburrir y coger sitio se convierte en toda una aventura…
Mikkeller: Considerados la tercera mejor cerveza del mundo, es un lugar que no te puedes perder si te gusta la bebida. Disponen de una cervecería y recientemente han abierto al lado un restaurante, en el que puedes combinar su cerveza con smorrebrot, el sándwich típico de la zona. Un 2×1 ideal.
The Union Kitchen: Lo vi recomendado en IG (el poder de las redes sociales) y reservamos para comer. Todo muy rico.
Paludan: Una librería cafetería pegada a la Universidad. Preciosa, tranquila y con unos brunchs que todavía no he logrado quitarme de la cabeza…
FishMarket: Lo encontramos de casualidad el día de los enamorados y, hartos de comer sandwiches a todas horas, decidimos celebrar ese día con una comida como dios manda. Fue increíble (no es barato, pero poder comerte una sopa de pescado calentita cuando en el exterior hace un frío de narices no tiene precio):
Y hasta aquí mis recomendaciones de Copenhague. Ojalá pueda repetir recomendaciones de otros lugares a menudo, será buena señal…
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