Poesía, naturaleza, arquitectura y carácter irradian de Soria, una de las ciudades menos pobladas de España y a su vez más desconocidas.
Aquí os sugiero mi ruta preferida, un paseo a orillas del río Duero donde las musas inspiraron desde Machado hasta a nosotros mismos.
¿Listos para empezar?
La Ruta
Este recorrido, de 4km aproximadamente, es ideal para excursiones de día a la capital y para combinarla con otras visitas al casco antiguo accediendo a través del puente, punto final de esta propuesta.
Paseo por la ribera del Duero
Empezamos nuestra ruta en la Calle Mirón, una especie de bulevar tranquilo cuyo mayor bullicio son las conversaciones de transeúntes y el cantar de los pájaros.
Calle Mirón
Minutos después nos sorprende la Ermita de Ntra. Sra. Del Mirón. Un edificio sobrio del que destaca el retablo mayor y las imágenes dedicadas a San Saturio, patrón de la ciudad. Nunca la he llegado a visitar abierta, pero si como yo os la encontráis cerrada, siempre podéis asomaros a curiosear su interior por los ventanucos de la puerta principal.
Ermita del Mirón
Dejando a lado izquierdo la ermita, continuamos la calle Mirón hasta el final de la misma, donde una escultura de Machado y Leonor observan a sus pies la ciudad castellana.
En recuerdo de Antonio Machado
Panorámica de Soria
Un pequeño sendero, que rodea las ruinas de la antigua muralla del castillo, nos permitirá avanzar en nuestro recorrido. Hay que seguir su paso hasta llegar al camino de San Ginés. Este camino de tierra nos introduce de nuevo a las afueras de la ciudad, en la calle San Vicente. Bajando el desnivel de la callejuela salimos a la calle San Agustín que desemboca directamente en el Puente de Piedra.
Por ahora no lo cruzaremos, buscaremos el margen del río y continuaremos por allí en dirección al curso natural del Duero. Él mismo nos hará de guía hasta llegar a la Ermita de San Saturio.
Márgenes del Duero desde el Puente de Piedra. En el centro, el Soto Playa
Márgenes del Duero desde San Saturio
Ermita de San Saturio
Su construcción, entre la roca y el río, impresiona desde la distancia. ¡Os recomiendo encarecidamente su visita! Mi parte favorita es el acceso a la misma a través de una pequeña gruta, así como el contraste entre la sobriedad de la fachada y el estilo barroco del interior.
Vistas desde San Saturio
Ahora volveremos en dirección Puente de Piedra por el margen izquierdo del río, el de la ermita, considerado Bien de Interés Cultural. Por esta orilla encontraremos "El rincón del poeta" lugar que la capital dedicó a Antonio Machado en 1932. Se dice que en este paseo escribió alguno de los poemas más importantes de su obra Campos de Castilla.
Poco antes de llegar al puente, el camino nos obliga a atravesar el Monasterio de San Polo, donde se sitúa la leyenda de “El Rayo de Luna” de Gustavo Adolfo Bécquer.
Monasterio de San Polo
Para terminar nuestro recorrido, pasando el puente de largo y continuando recto, llegamos al Monasterio de San Juan de Duero. De estilo románico, la iglesia y los arcos del claustro destechado son unos de los lugares más mágicos de toda la ruta que sirvió de inspiración a Bécquer al basar aquí su leyenda “El Monte de las Ánimas”.
Arcos del Monasterio de San Juan
Detalles de la iglesia - Monasterio de San Juan
Recomendaciones
Visitar la zona durante la primavera/verano – Aunque un buen soriano solo dirá que "refresca" en pleno invierno, el clima veraniego nos permite disfrutar de actividades al aire libre, una atmósfera más festiva (especialmente si vais en San Juanes) y un margen de horarios ampliado en las principales atracciones turísticas.
Comer en el Soto Playa - Es una verde pradera envuelta por el río al partirse en dos en el puente de piedra. Se localiza entre El Monasterio de San Polo y la primera parte del margen derecho del río. Dispone de merenderos, cafetería y una zona adaptada para el baño.
¡Déjate sorprender por las ciudades más insospechadas! Así que ya sabes,
Viaja et verba.