Aquí os dejo algunas de las 'cogorzas' más sonadas.
Lindsay Lohan es una habitual de la noche. La actriz de 24 años de edad es más conocida por sus juergas y sus excesos que por las pelis que protagoniza. Esperemos que, por su bien, termine sentando la cabeza.
Kiefer Sutherland (actor inglés de 44 años) pasó hace unos años una mala época a nivel personal, y se dedicó a beber y a meterse en peleas cada dos por tres. Siempre se ha dicho que está un poco mal de la cabeza.
La actriz Kirsten Dunst, conocida por su papel de Mary Jane en la saga de Spiderman, tampoco le hace ascos a
tomarse un buen copazo con los amigos.
Mel Gibson, protagonista de pelis como Braveheart o Arma Letal, se ha echado a perder en los últimos años. Sus constantes borracheras y denuncias por agresiones le han hecho ganarse el odio de muchos fans.
El piloto de F1 Kimi Raikkonen es más conocido en el paddock por su gusto por las fiestas que por su velocidad en la pista. Aunque siempre intenta ser muy discreto, de vez en cuando los paparazzis le cazan en situaciones como estas.
El cantante de 31 años Pete Doherty, hasta hace poco compañero sentimental de Amy Winehouse, lleva años inmerso en una especie de fase de autodestrucción en la que el alcohol y las drogas están presentes a lo largo de todo el día. Si buscas fotos en Google, es realmente difícil encontrar alguna imagen en la que salga sobrio.
David Hasselhoff, el mítico Michael Knight, también mantiene una relación demasiado especial con la bebida. Dicen que, harto de sus borracheras, les pidió a sus hijas que le grabaran cuando estuviese bebiendo. De ahí salió un vídeo famoso en el mundo entero donde se le ve comiendo una hamburguesa con muchas dificultades.
Guti, jugador canterano del Real Madrid que actualmente juega en el Besiktas, saltó hace unos días a todas las portadas por un accidente de tráfico que sufrió cuando, tras circular por una calle en dirección prohibida, chocó contra un autobús. Según la policía, iba bastante bebido.