Por eso queríamos desvelaros si Netflix es capaz de romper su mala racha con sus grandes producciones, o si su verdadera esencia rebosa en películas sencillas como el Ascenso. Decid vuestras últimas palabras porque esta Crítica/Review Sin Spoilers de Mute (Mudo), os dejará sin poder susurrar ni una de ellas. ¿Estáis listos?
Sinopsis de Mute – La Venganza de la Ciencia Ficción de Netflix
Netflix y su director Duncan Jones, te lanzan de manera furtiva aún Berlín distópico con un aroma a Blade Runner y ciencia ficción que te transmite grandes impresiones. Las luces de neón, la extravagante sociedad a la que nos dirigimos y en general, un interesante universo abre sus puertas en los primeros minutos de Mute. No tan alejado de la realidad como Altered Carbon, sino que sigue mucho más anclado al presente como la distopía de Philip K. Dick.
Un accidente hace que nuestro protagonista pierda las cuerdas vocales, ejem La Forma del Agua ejem, pero por sus creencias deciden mantener al pequeño así y no intervenir, algo que le marcará para el resto de su vida. De adulto Alexander Skarsgård, mantendrá esos cimientos religiosos, marcando un contraste visualmente atractivo al resto del desarrollo de su ciudad. Ahí, enamorado perdidamente de Naadirah, una encantadora camarera con oscuros secretos, le será arrebatada de entre sus manos. Justo en ese momento, comenzará una silenciosa persecución por todo Berlín, con el único fin de encontrar a la mujer de su vida. Hasta ahí y con un concentrado pero interesante universo por conocer en Mude, todo funciona como un reloj. Infelizmente, la película comienza a tragar aire y no dejar claro qué quiere contar y hacia donde quiere llegar.
Menos mal que habéis acudido a leer la Sinopsis, porque hasta los 40 minutos de la cinta, te sientes totalmente perdido y no encuentras sentido al argumento de la cinta. A partir de ahí, cuando entiendes que la película no te va a ofrecer nada más, comienzan a enredarse los hilos, repitiendo unas estructuras demasiado clásicas y demasiado vistas. Una lista enumerada de buenas ideas, que no acaban de ser bien atadas y se desvanecen en silencio.
Duncan Jones va repartiendo las cartas de su baraja, y tú con cara de tonto, esperando un golpe de efecto. Lo tienes, tranquilo, pero no satisface la curiosidad que te había creado este mundo, y ni mucho menos justifica la duración de más de dos horas de la película. Sí, estamos hablando de otra oportunidad perdida para Netflix.
El Gran Reparto de Mude, otra oportunidad estrellada
No sabéis cuanto me duele que un guión desajustado haya hecho perder la capacidad de contener tan gran nivel de actores. Desde Alexander Skarsgård quien expresa muy bien con su rostro aquello que siente. El problema es que realmente la falta de palabras del protagonista, acaba siendo una excusa. Intentan mostrar algo “diferente” pero no potencian la mudez de un gran actor.
Esta cinta se acompaña de Paul Rudd, nuestro querido Ant-man, quien creo que se come la película con un protagonista tan carismático como in crescendo en matices. Su alter ego en carisma lo reparte Justin Theroux, que con un Rubio Pollo teñido marca otro de los personajes muy alejado de los estereotipos que cumple a la perfección en su papel. Lástima, que aparece de manera demasiado fugaz y de nuevo, parece que ha sido una oportunidad perdida. No os imagináis mi sorpresa al ver que Sam Rockwell, mi nueva obsesión después de 3 Anuncios en las Afueras , aparece en la película. Un papel totalmente menor, que lo mejor que consigue es recordarme la mejor película del año. Y sí, ya de paso perturba a más no poder.
Netflix se queda sin palabras en Mute
El gran universo que parecía que había creado, se queda en ciertos atisbos de originalidad, pero con la sensación de ser una caja cerrada, en la que te enseñan siempre el mismo escenario. No puedo desmerecer la imaginación que han tenido en ciertos toques mágicos de Ciencia Ficción que os dejaré descubrir. Aunque el problema vuelve a ser la necesidad de mostrar algo sucio y perturbado de manera gratuita. No, el futuro puede ser sucio, pero no solo será así.
La música de Mute suena de manera discreta, escrita por uno de mis compositores favoritos Clint Mansell. No se aleja de sintetizadores y notas de piano, que se va diluyendo y pasando desapercibida a cada minuto del metraje. Está bien cuidada, pero no pasará al recuerdo al igual que Mute.
Con total sinceridad esperamos que Netflix tenga mucho más que decir a nivel cinematográfico. Otra oportunidad perdida, aunque no deja de ser una película interesante y bastante adictiva. Lástima que las cartas barajadas hayan sido tan buenas y la jugada tan errónea.
Como siempre un placer escribir para vosotros.
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Fuente: este post proviene de Sexta Butaca, donde puedes consultar el contenido original.
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