Era un pedido personalizado, con tres galletitas para él de camiseta del barça y 3 galletitas para ella de muñecas rusas.
Además querían unos bomboncitos de ese chocolate belga del que tanto les había hablado, así que aproveche para probar cosas nuevas y decorarlos con sprinkles.
La verdad es que al final quedó una cajita muy chula, espero que les haya gustado