Toledo, es una ciudad que me encanta.
Me gusta perdernos por sus calles super estrechas, calles que tiene mil sitios para descubrir.
Pero si hay una época, en la que me gusta visitar Toledo, es en Navidad.
Para nosotros es tradición, ver el belén de la caja Rural, que tiene animalitos de verdad subir por la escalera mecánica y perdernos por las calles del casco viejo y llegar a la plaza de Zocodover.
La iluminación se enciende a las 18.30h.
Os cuento un poco lo que vimos nosotros.
Al subir por la escalera mecánica (Subida Granja, 1), podemos disfrutar de unas vistas preciosas de toda la ciudad.
cuando la escalera te deja en la parte de arriba, tienes una oficina de turismo, donde te informan de todo lo que necesites.
Dando un paseo, descubriendo sus estrechas calles, llegamos a la plaza del ayuntamiento.
En ella, está la catedral, un mercadillo navideño, en el que podemos encontrar deliciosos churros y chocolate caliente, patatas fritas artesanales, bufandas, guantes…. y algún juguete y además , también hay un precioso tiovivo .
No os podéis perder las vistas desde el mirador.
En la mayoría de las calles, encontramos alguna decoración Navideña, pero dónde está lo verdaderamente decorado es la calle del comercio.
En la plaza de Zocodover, encontramos un mercadillo navideño.
Cuando se enciende la luz, nos encontramos todos los árboles decorados, algunas fachadas, también están decoradas.
En la calle del comercio, encontramos una puerta preciosa, que nos lleva por toda la calle.
Además del casco viejo, podemos encontrar preciosa iluminación navideña en el puente de Alcántara y el puente de San Martín.
Antes de ir, te recomiendo, que eches un vistazo, a la web del ayuntamiento de Toledo, para que no te pierdas, ninguna de las actividades que hay para niños de forma gratuita.