Cada año se extraen de allí 25 000 toneladas de sal, pero, además, es también una de las mayores reservas del planeta de litio (140 millones de toneladas) y cuenta con importantes cantidades de potasio, boro y magnesio.
Formación
El área que hoy ocupa este desierto estaba cubierta hace 40 000 años por el lago Minchin y posteriormente, hace 11 000 años, por el lago Tauca (o Tauka), alcanzando una cuota de alrededor de 100 metros por encima del nivel actual del Salar. Estos, cubrían los actuales Salares de Uyuni y Coipasa, y los lagos Poopo y Uru Uru.
Existen aproximadamente 11 capas de sal, con espesores que varían entre menos de un metro y diez metros, como la de la costra que se encuentra en la superficie. La profundidad del salar es de 120 metros, el cual está compuesto de capas de salmuera superpuestas y barro lacustre.
Esta salmuera se compone de litio, boro, potasio, magnesio, carbontos (borax) y sulfatos de sodio. Un mineral muy interesante es la ulexita, denominada la «piedra televisión» por su transparencia y que tiene el poder de refractar a la superficie de la piedra la imagen de lo que está debajo.
A este salar se lo considera como la mayor reserva de litio del mundo, aunque es de muy difícil extracción por la falta de agua.
Composición
La cuenca del Salar de Uyuni es endorreica, es decir, que no tiene salida al mar, pero es abastecida por los rios Quetena, de 130 km de longitud, y el río Grande, que alcanza los 90 km.
Sin embargo, las aguas que fluyen en la región son, en su gran mayoría, de origen subterráneo y además, antiguas.
Una parte importante del agua almacenada en los acuíferos subterráneos son consideradas por algunos expertos como un recurso no renovable, debido a que proviene de lluvias ocurridas en tiempos geológicos lejanos.
Estudios realizados en el área coinciden en que la recarga de los acuíferos en la región es actualmente muy débil o casi inexistente. La recarga de esos acuíferos pudo haberse producido en un periodo comprendido entre algunos cientos y varios miles de años, en que las condiciones climáticas eran diferentes a las actuales.
Las investigaciones han confirmado que la contribución de las aguas de precipitaciones recientes a los flujos de agua que recorren por la superficie de las cuencas es baja, por lo general, menor al 10 por ciento.
Por ello, aseguran los expertos, los impactos ambientales y sociales de una utilización irresponsable de estos recursos podrían ser irreversibles.
En el salar de Uyuni el método tradicional de extracción de sal consiste en formar pequeñas pilas, para que se evapore el agua y facilitar el transporte.
Turismo
El salar de Uyuni es también uno de los principales destinos turísticos de Bolivia, lo visitan aproximadamente 60 000 turistas cada año.
Los visitantes pueden encontrar en el lugar tres especies de flamencos sudamericanos: el flamenco austral, la parina grande y la parina chica.
Además, existen cactus gigantes de hasta 10 metros de altura situados en la Isla del Pescado, la mayor del conjunto de islotes situados en el centro del Salar de Uyuni.
Otra atracción de la zona son las momias encontradas en una caverna situada al borde del salar que se estima tienen 3.000 años de antigüedad.
A orillas del salar se encuentran varios hoteles construidos con bloques de sal, característica que los ubican entre los hoteles más extravagantes del mundo.
Como el terreno del salar es tan plano, también sirve como una ruta de transporte a través del altiplano boliviano.