Sabor, alma y pasión. Omeraki. La -perfección del círculo- según la cultura japonesa que representan con la O, si le añadimos -un poco de griego y otro de turco-, ensamblamos la palabra meraki, o lo que es lo mismo, ponerle sabor a la vida, grandes dosis de alma y pasión.
Omeraki, es un restaurante que te desconcierta con tan solo poner los pies en su entrada, aquí hay madera. Unas estanterías repletas de -obras de cocina y lecturas de Alberto– te ofrecen la bienvenida, insólito paseo hasta su recepción.
Ya en su interior se abre el taller, de techo prominente desde donde cuelgan figuras geométricas de madera de gran tamaño y neones a discreción.
Dispone de dos cocinas, ambas con vistas al respetable público que allí se da cita. Desde su platea, podrás disfrutar del espectáculo en riguroso directo y sin red.
Comandan la nave Jesús Almagro (jefe de cocina) y Alberto Chicote junto a su mujer Inmaculada Núñez (directora del restaurante). El nuevo proyecto tras pasar página en Yakitoro, nos ofrecen una cocina -de aquí y un poco más allá-, apoyándose en dos propuestas de menús degustación Festival y Homenaje que cambian algunos platos cada día.
Tres, dos, uno, comienzan los créditos. Rulos de mantequilla, de polen y de wasabi, ambas son ligeras y de fina contextura, custodian con diferentes panes que pasan antes por la robata, <<alé alé>> a extender.
Todo en su sitio (mise en place), antes de comenzar la sesión. Delante de tus ojos, asistirás a la elaboración de un guacamo … noooo, resulta una crema de ajos al mortero de piedra volcánica.
Ajos blancos y negros, amargos y dulces, fuertes y suaves, armonizados con aceite de arbequina con pimentón y ajo frito. <<No repite>>, ¡lo harás tú!, -pringando una y otra vez- junto al pan.
Carrusel de aperitivos sobre la mesa:
Bocado de vermut (base de mandarina fermentada y deshidratada, gel de aceituna y espuma de vermut rojo)
Croquetas de compango (con las carnes de pote asturiano)
Almeja al natural (servida en la fruta de la pasión, chalota y albahaca morada)
Buñuelos cremosos de bacalao (con aceite de guindillas frescas)
Piparras en tempura (los langostinos de Ibarra)
Pâté en crôute (de ibéricos, ciruelas y gelatina)
Tantum Ergo Pinot Noir Brut Nature 2019 de bodegas Hispano+Suizas.
Nombrado mejor espumoso y Cava de España, 100% Pinot Noir, de color rosa pálido, en nariz nos recuerda aromas de frutos rojos y un ligero toque de vainilla tostada. De acidez equilibrada y final muy largo, cremoso, sabroso.
En la base una suculenta emulsión de tomate y aceite de oliva, arropada de sardinas marinadas en vinagre de arroz, almendras tiernas y altramuces. Estimulante propuesta fresca.
En modo carpaccio de gamba blanca de Huelva, descubrirás en su interior un ravioli relleno de berenjena guisada. ¡¡¡Ojo al plato que viene very Hot!!! me encanta.
Edamame sobre caldo de verduras -emulsionado con mantequilla-, brotes verdes y flor de ajo. Nunca unas vainas de soja habían dado tanto, las verduritas al dente, ¡¡¡que ricas!!!
Solo por esta propuesta -merece la pena- poner las manos en la mesa, aunque te manches, te rechupetearas los dedos. Hablando con Chicote, le dije que este platazo debería quedarse siempre en el menú.
Generoso bogavante elaborado al estilo chilli crub, tipico plato de origen asiático (made in Singapur), alzado sobre un rösti de patatas.
Su sabor resulta totalmente democratizado para gustar a todos los públicos, justo de picoso y no más. Excelentemente delicioso.
Continuamos -en formato ravioli-, en esta ocasión de espinacas relleno de ternera guisada y salsa pesto, en la base, la propia reducción de la carne. Bocados con gusto.
Merluza en amarillo con patatas a la importancia. Cocinada al vapor y finalizada con una salsa melosa de aromas a oloroso y azafrán.
Que importante resulta tener una buena patata escoltando a un extraordinario producto.
Cortado a cuchillo, steak tartar de vaca rubia gallega con 45 días de maduración y patatas chips con especias japonesas. ¡¡Sabrosón!!
Molleja de ternera guisada y glaseada con su jugo. Casquería de luxe, que nos entrega un sabor tan peculiar. Gominola gigante para el paladar.
Vamos concluyendo, y lo hacemos con un brownie de chocolate y nueces, al que acompañan con helado de vainilla. Ideal para los golosos y no tanto, debido a un ponderado dulzor.
Tarta al whisky helada, el dessert de toda la vida y que ocupaba mesa muchos domingos en casa, una variante diferente la que nos presenta Alberto, sinceramente echo de menos la -yema tostada- en su cumbre, aún así, sigue siendo igual de refrescante.
Sitio web: www.omerakirestaurante.com/
Precio menú degustación: 78/96 euros
Horario: De martes a sábados de 13:30 a 15:30 y de 20:30 a 23:00 horas y domingos de 13:30 a 15:30.
Teléfono: 910 88 03 26
Fuente: este post proviene de Las manos en la mesa, donde puedes consultar el contenido original.
¿Vulnera este post tus derechos? Pincha aquí.
Creado: