Laura Gallego es una de autoras españolas de literatura fantástica que no puedes evitar mencionar cuando te piden que recomiendes un libro del género. Desde su saga de ´Memorias de Idhún, a la más reciente El libro de los portales la escritora se mueve cómodamente en el género de la literatura juvenil, aunque del que hablamos hoy tiene un toque ligeramente más infantil.
La historia trata de Nico, un niño que tira a la basura el peluche favorito de su hermana pequeña. Al darse cuenta de su error, tratará de remediarlo hasta que se le ocurre que tal vez pueda comprar uno nuevo en Omnia, una tienda virtual que tiene absolutamente de todo a la venta. Cuando va a proceder a la compra, el artículo desaparece de la página ante sus ojos, tal vez debido a un error del almacén. y Nico decide viajar a la sede oficial de Omnia para encontrar el peluche. Lo que no puede imaginar es que la tienda online se encuentra muy, muy lejos de su hogar...
En Omnia, Nico conocerá a un grupo de trabajadores que le ayudarán a integrarse en un ambiente de trabajo en cadena al que tendrá que adaptarse mientras intenta averiguar cómo escaparse a buscar el peluche en el almacén, que en realidad es tan grande como una ciudad y está custiodado por robots que recogen los pedidos.
Es inevitable pensar en cierta tienda online como inspiradora de ésta historia, dándole un toque de fantasia/ciencia ficción a la sociedad que trabaja en la sede de la tienda, así como a diversos factores (preparación y envío de los pedidos, los robots del almacén...) o los productos que se venden, juguetes futuristas y una gran imaginación por parte de la autora.
La historia está ilustrada por Xavier Bonet con una serie de ilustraciones de carácter infantil, pero muy detalladas que acompañan perfectamente la historia.
La historia puede decepcionar a los lectores adultos, pero es una historia entretenida y bien resuelta, ideal para recomendar al público juvenil al que está destinado originalmente.