Covadonga González-Pola
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No hay nada de este libro que no me guste. Se trata de un retelling muy especial pues en estas siete historias la autora ha imaginado un "qué hubiera pasado si..." en el caso de que lo cuentos los trasladáramos a la vida real actual con mujeres empoderadas e independientes que en lugar de esperar pacientemente al príncipe rescatador, dieran un buen palo en la mesa y dijeran "ya está bien".
Cenicienta, Nala, Ariel, Bella, Jasmín, Aurora y Blancanieves nunca fueron tan humanas, tan cercanas ¡tan valientes! porque entiendo que a una millenial le repugne lo que a las niñas de mi época nos encantaba pues nadie nos daba más opción que la de estar quietecita y callada para parecer más linda y así encontrar a alguien (un marido) que nos abriera las puertas... las puertas físicas y las puertas del mundo, claro.
¡Ahora las niñas ya no quieren ser princesas! quieren ser astronautas, deportistas, actrices, médicas, científicas... quizás antes también queríamos serlo, pero no pudimos ¡o no quisimos! pero ahora todo está cambiando, la Tierra está viva y sus habitantes también, todos ellos, independientemente de que seamos hombres o mujeres.
Y a mí todos los libros que cambien la historia, que evidencien la igualdad, que normalicen la diversidad de decisiones... me enamoran. No es un libro romántico, etéreo ni tiene perdices para comérselas al final, lo que tiene son personas de carne y hueso a las que les suceden cosas buenas y cosas malas, como a todo el mundo a lo largo de la historia de la humanidad... solo que esta vez hay unas cuantas diferencias: mujeres con decisión, valentía y autoestima, mujeres autodidactas, empoderadas y autónomas. Y en ese sentido sí que es una historia de lo más bonita que seguimos construyendo entre todos y entre todas y que aún no ha terminado ^^
Fuente: este post proviene de Diario de una Chicka Lit, donde puedes consultar el contenido original.
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