Autores: Ed Brubaker, Bill Finger y Bob Kane, entre otros
Tipo: cómic
¿Sobre qué trata? Catwoman, al contrario de lo que muchos piensan, no es una superheroína, es más bien una villana que se cuela en lugares como joyerías para robar sigilosamente sin ser vista y siempre durante la noche, de ahí le viene el nombre.
En mi opinión... ¡es el único personaje de cómic que me encanta! Y me encanta porque no intenta salvar al planeta ni nada de eso, sino que le atraen objetos brillantes y se las apaña para conseguirlos de una manera muy sutil (sí, yo también soy una caprichosa). Es mala y sabe utilizar todas sus armas de mujer para engatusar a quien haga falta para conseguir lo que quiere. No llega con una verborrea bravucona como los típicos héroes, no le interesa el reconocimiento y es solitaria
En estos cómics tiene un rollo muy especial con Batman, que por cierto, no me cae nada bien, porque como ya he dicho antes, no soy de héroes sino de villanos. Me encanta como crean el personaje de Catwoman, las habilidades que la perfilan y cómo actúa en cualquier situación, con ese aire de misterio e independencia.
Simboliza, de alguna manera a las mujeres fuertes y autónomas, cosa que en el momento de su creación era toda una novedad. Sin embargo, por otro lado, también podría ser un grito de rabia o un golpe contra el sistema, por eso de que es una ladrona, como que está fuera de las normas sociales y a mí, todo lo que vaya contra los convencionalismos... (irónicamente) me convence.
El problema es que puede haber mil opiniones con respecto a este personaje pues tiene múltiples creadores y cada uno da una nueva versión del origen de catwoman, su relación con los atracos, la seducción, Bartman y el mundo en general. Incluso al llevarla al cine hay grandes diferencias entre unas y otras, no solamente debido a la actriz que la encarne sino a las características que al guionista se le antojen en ese momento. Yo, personalmente, me quedo con Halle Berry.
Y para ir terminando, un dato curioso: en realidad no me compré estos cómics, venían de regalo con una muñeca, una edición de coleccionista de Barbie que, por cierto, costó un riñón y parte del otro. La tuve en mi poder hasta hace un par de años, momento en el que me vi obligada a venderla para poder subsistir ¡fueron malos tiempos! sin embargo, conservé los cómics.
Finalmente, no suelo reseñar sobre cómics o mangas porque, la verdad, para mí son una ruina, no tardo nada en leerlos y son tan adictivos que siempre quiero más y más, así que, como no puedo permitirme tanto gasto, de momento, me recorto bastante a la hora de comprar este tipo de formatos. ¿A vosotros también os pasa?
Y ya que pregunto ¿cuál es vuestro personaje de cómic o manga preferido? ^^