?Blaze? fue escrita incluso antes que ?Carrie?, y el manuscrito fue entregado junto con el de ?El misterio de
Salem?s Lot?. Nunca vio la luz y se quedó aguardando su turno hasta que el autor decidió darle una segunda oportunidad. La retocó para corregir aquellas cosas que no le convencían y vio la luz en 2006.
Pero vamos a lo que interesa, que es la historia. El protagonista es Clay Blaisdell, llamado simplemente Blaze por todos, un grandullón sin muchas luces pero con buen fondo, que durante toda su vida ha visto como se le cerraban las puertas de la buena suerte, ya desde el momento en que su padre lo tiró por la escalera y le provocó una lesión cerebral, así como un profundo hueco en la frente.
La novela se divide en conocer el presente, que ahora abordaré a continuación, y el pasado, a mi parecer, la parte más interesante de la historia. Pasando por orfanatos y correccionales, contando tan sólo con un amigo de verdad hasta conocer de mayor a George, un experto timador que acoge a Blaze bajo su protección y emprenden una beneficiosa sociedad en la que realizar sus pequeños trapicheos.
Pero George está dispuesto a llevar a cabo un plan que les retirará para siempre: secuestrar al bebé de una familia de millonarios para pedir un rescate. Todo el plan está listo y esperan al mejor momento para llevarlo a cabo, pero George muere? aunque Blaze está decidido a llevar a cabo la tarea igualmente, y es la parte del presente de la novela: el secuestro del pequeño heredero y las ?conversaciones? que mantiene con George, pese a que sabe perfectamente que está muerto y que sólo está en su cabeza.
Stephen King pocas veces decepciona y ?Blaze? consigue entretener durante todo su desarrollo. Con los acertados cambios entre el presente y el pasado del protagonista sientes una empatía enorme, y sufres con él todas sus desgracias. Sin duda el pobre Blaze no puede presumir de tener buena estrella en muchos sentidos, y disfrutarás de sus pequeñas victorias, aunque ya desde el principio sabes que esta historia no tendrá un final feliz.