La historia de Edimburgo está impregnada en cada rincón de la ciudad, desde los callejones empedrados hasta los museos y monumentos históricos. Esta ciudad, con su encanto medieval y su ambiente acogedor, ofrece a los visitantes una experiencia única que combina la grandeza del pasado con la vitalidad del presente. Se trata del punto de partida de la mayor parte de los Tours por Escocia, los cuáles recorren las Tierras Altas del país, la isla de Skye, las islas Hébridas Interiores de Escocia, el Parque Nacional del Lago Lomond y otros muchos rincones del país. En este artículo, nos centraremos en el tour por la ciudad, mencionando los lugares imprescindibles que ver en Edimburgo durante tu viaje a la capital escocesa.
Royal Mile
La Royal Mile es una de las calles más emblemáticas y animadas de Edimburgo, situada en pleno corazón del casco antiguo de la ciudad. Con una longitud aproximada de una milla escocesa, de ahí su nombre, esta histórica arteria conecta dos puntos icónicos dentro de la ciudad, el Castillo de Edimburgo en uno de los extremos y el Palacio de Holyroodhouse en el otro extremo. Caminar por la Royal Mile es sumergirse en siglos de historia y tradición escocesa, moviéndonos a través del tiempo hasta la época medieval. La calle está repleta de edificios históricos, pintorescas tiendas de recuerdos, acogedores pubs, restaurantes tradicionales y una amplia variedad de atracciones turísticas.Uno de los lugares más importantes de la Royal Mile es la Catedral de St. Giles, con su arquitectura gótica imponente y su fascinante historia. Esta Catedral, levantada en el Siglo IX, marca el punto intermedio de la Royal Mile, convirtiéndose de esta manera en una referencia perfecta de la ciudad. Además, a lo largo de la Royal Mile, también encontrarás encantadores callejones empedrados conocidos como closes que conducen a patios escondidos y rincones pintorescos. Estos espacios ofrecen una visión única de la vida en la Edimburgo antigua, siendo sitios en los que sacar las mejores fotografías del Edimburgo oculto.
Castillo de Edimburgo
Como hemos comentado, comenzando en un extremo de la Royal Mile de Edimburgo encontramos el castillo de Edimburgo. El Castillo de Edimburgo, ubicado en lo alto de Castle Rock, es uno de los monumentos más importantes de Escocia y una visita obligada en Edimburgo. Con una historia que se remonta más de mil años hacia atrás, el castillo ha sido testigo de innumerables eventos históricos y ha sido escenario de batallas, coronaciones y acontecimientos reales.Al adentrarse en el castillo, los visitantes pueden explorar sus diversas salas, como el Gran Salón, donde se celebraban las grandes ceremonias, y los Honores de Escocia, o, Honours of Scotland, sala que alberga las Joyas de la Corona escocesa, incluida la Piedra del Destino, el famoso Stone of Destiny. El Museo Nacional de la Guerra de Escocia es otra atracción destacada dentro del castillo, donde se exhiben artefactos militares históricos y se cuenta la historia de las guerras y conflictos que han moldeado la nación.
Palacio de Holyroodhouse
El Palacio de Holyroodhouse, ubicado al otro extremo de la Royal Mile en Edimburgo, es la residencia oficial de la reina en Escocia. Este sorprendente y enorme palacio, con una historia que se remonta al siglo XII, ofrece a los visitantes la oportunidad de explorar un sinfín de lujosos interiores. Este palacio es conocido por su conexión con la reina María I de Escocia, María Estuardo, quien residió en una torre de la parte más antigua del castillo en el siglo XVI.
Los visitantes pueden explorar las habitaciones reales, como el Gran Salón y la Cámara de Audiencias, que están bellamente decoradas y muestran muebles y arte de época. Los jardines del palacio también son un lugar destacado para visitar, con hermosos parterres, fuentes y senderos tranquilos, los jardines ofrecen un oasis de calma en el corazón de la ciudad.
Calton Hill
Calton Hill es la colina más famosa de Edimburgo, ofreciendo unas vistas panorámicas de la ciudad únicas. Con su paisaje impresionante y sus icónicos monumentos, Calton Hill es el lugar favorito para los turistas para tomar la cámara y sacar una fotografía perfecta del atardecer en Edimburgo. Asimismo, la colina es conocida por albergar una serie de monumentos y estructuras emblemáticas, como el Monumento Nacional, inspirado en el Partenón de Atenas, y, construido en honor de todos los soldados escoceses que perecieron durante las Guerras Napoleónicas.Otro hito en Calton Hill es el Nelson’s Monument, una torre en forma de telescopio dedicada al almirante Nelson, que ofrece una vista espectacular de la ciudad desde su plataforma de observación. Además de sus monumentos, Calton Hill es un lugar ideal para disfrutar de un tranquilo paseo o un picnic en medio de su belleza natural. Los jardines y espacios abiertos de la colina ofrecen un ambiente tranquilo para relajarse y disfrutar de las vistas panorámicas de Edimburgo, pudiendo tomar algo mientras se ve el atardecer.
Mary King’s Close
Mary King’s Close es una atracción turística única en Edimburgo, una serie de callejones subterráneos y estrechos que datan del siglo XVII. Durante mucho tiempo, estos pasajes estuvieron ocultos bajo la Royal Mile y fueron redescubiertos y abiertos al público en la década de 1990. El nombre Mary King’s Close se refiere a una mujer llamada Mary King, quien era propietaria de varias propiedades en la zona durante el siglo XVII.Los visitantes pueden recorrer los callejones y explorar el pasado turbulento de Edimburgo. A través de visitas guiadas, se cuentan historias fascinantes sobre la vida en los callejones, las condiciones insalubres, las supersticiones y las leyendas que los rodean. El recorrido por Mary King’s Close es una oportunidad para sumergirse en la historia de Edimburgo y descubrir cómo era la vida en la ciudad en tiempos pasados, siendo una experiencia única que transporta a los visitantes a un mundo subterráneo lleno de misterio y fascinación.