En un día como hoy, pero de 1892, Émile Reynaud, inventor y pionero del cine de animación francés, creador del praxinoscopio y del teatro óptico, -además de ser el primero que perforó la película como medio de arrastre mecánico-, celebraba la primer proyección pública del Théâtre Optique, en el Museo Grevin de París.
El teatro permitía proyectar sobre una pantalla translúcida cintas que él mismo hacía pasar entre dos bobinas, un sistema de luz y espejos, tras la propia pantalla, y una linterna proyectaba una imagen fija con el escenario o decorado sobre el que se desarrollaba la animación. Bajo el nombre de Pantomimes Lumineuses, aquella vez se proyectaron tres cintas: Pauvre Pierrot, película dibujada y coloreada a mano por el propio Reynaud, inspirada en la comedia del italiana Arlequín, Pierrot y Colombina, siendo una de las primeras animaciones en usar el calcado sucesivo sobre hojas transparentes; Le Clown et ses chiens, consistía en 300 imágenes pintadas a mano que relataban la historia de un payaso, un circo y sus tres perros; y Un Bon Bock, 700 imágenes que lamentablemente son consideradas como una obra perdida, ya que Reynaud destruyó la película original mientras atravesaba un período depresivo.
Las proyecciones estaban sincronizadas con música y efectos sonoros compuestos por él mismo, y albergaban un tono naif y poético. A partir de ese momento a Émile Reynaud se le consideró el creador de los dibujos animados, incluso Walt Disney le rindió homenaje con un cortometraje sobre su trabajo, el arte animado y el praxinoscopio. Y es por ello que cada 28 de octubre, el Mundo conmemora este importante hito de la cinematografía de animación. ¿Cómo lo celebrarás?