Le he cogido el gusto a esto de hacer un post sobre las series vistas cada año. Muchos lo hacen en Twitter, pero como a mí no me van los hilos prefiero contároslo por aquí.
Este año ha sido muy productivo en cuestión de series. ¡He visto un montón! Se debe sobre todo a que este año contratamos Netflix, hemos pasado mucho más tiempo en casa y le regalé a Mr. Preppy un Amazon Tv Stick (lo cual, si no tenéis una smart tv, os recomiendo muchísimo). Todo a contribuido a que este sea el post anual de series más largo hasta la fecha. Eso sin contar las siguientes temporadas de las series que ya seguía de antes.
No es que todas estas series hayan sido mis favoritas, pero sí que es cierto que las que no me han gustado nada ni siquiera las incluyo. No tengo una serie más destacada que las demás este año, pero sí que me han gustado especialmente Little fires everywhere, Gambito de dama y Yo nunca. ¿Cuáles han sido las vuestras?
Dos que se me han quedado pendientes son Patria (HBO) y Veneno (Atresmedia), ambas españolas. Espero poder verlas en 2021.
Nuevas
1- Katy Keene (The CW)
Después de ver Riverdale y Las escalofriantes aventuras de Sabrina, el paso natural era ver Katy Keene, otro de los cómics de la serie de Archie y, por tanto, segundo spin-off de la serie original. Lamento comunicar que ha sido cancelada, pero la temporada que hay no está nada mal.
Katy Keene es una joven aspirante a diseñadora que vive en Nueva York con sus amigos. Conocida de Veronica, esta la pone en contacto con Josie para que vivan juntas en NY y la cantante pueda intentar crear una carrera musical en la Gran Manzana. A diferencia de sus predecesoras, Katy Keene no tiene misterios ni cosas sobrenaturales. Tiende más a parecerse a otras ficciones como Gossip Girl, The bold type o Glee, aunque comparte el universo Archie y sus personajes.
A mí personalmente me ha gustado mucho más que Riverdale. Es entretenida, divertida, emocionante... Y como su protagonista quiere ser diseñadora, el buen gusto burbujea por todas partes y hay mucho contenido sobre moda (¡mundo drag incluido!).
2- Dash and Lily (Netflix)
Una de las apuestas navideñas de la plataforma es esta miniserie de capítulos cortos que está inspirada en una novela. Dash y Lily son dos adolescentes solitarios que viven en NY y que van a pasar solos la Navidad por diferentes motivos. Por una casualidad del destino, se acaban encontrando de forma anónima al compartir un cuaderno en el que se van contando intimidades y dejando pistas sobre sus identidades. Lo que pintaba como una Navidad deprimente se acaba convirtiendo en un curioso juego en el que se retan el uno al otro y descubren cosas sorprendentes.
Si os gustan las cosillas de Navidad dadle al play ya mismo. Se ve en una tarde.
3- Emily in Paris (Netflix)
¿Quién no conoce Emily en París? Si tienes Netflix la has visto cada día en el top 10 de España. Se trata de la nueva apuesta de Darren Star, creador de Sexo en NY, para volver a arrasar con una serie que aúna moda, amor y glamour.
No lo ha conseguido. Sí, todo el mundo habla de esta serie, pero casi nunca por una buena razón. Yo la he visto porque peores cosas me he tragado, honestamente, pero no me parece buena. Tanto es así que sentí la necesidad de hablar de ello en Stories porque quería desahogarme. No voy a decir nada por si os gusta o por si aún no la habéis visto. Solo diré que la trama gira en torno a Emily, una norteamericana que es enviada a París a trabajar a una empresa de marketing y llevarles "el punto de vista estadounidense".
4- Unorthodox (Netflix)
La historia en sí no me llamaba, pero me animé con esta miniserie por las excelentes críticas. Si bien no me ha parecido lo mejor del año, está muy bien. Está basada en la autobiografía de una mujer que huyó de una comunidad judía ultraortodoxa ubicada en Nueva York. La realidad que describe es muy fuerte, es un ambiente muy asfixiante para las mujeres en el que están tan anuladas que tienen, incluso, prohibido ponerse el cinturón de seguridad en el coche.
Lo cierto es que consta solo de 4 capítulos, así que perfectamente se ve en un día, por lo que merece la pena darle una oportunidad.
5- Hollywood (Netflix)
Una miniserie estupenda para aquellos que nos encanta el mundo del cine. Es un producto de Ryan Murphy, por lo que obviamente es bueno, en el que el showrunner nos lleva a la época dorada de Hollywood y al momento de los grandes estudios. Es visualmente maravillosa, con una ambientación espectacular y unas interpretaciones brillantes.
La historia sigue a varios aspirantes a cineasta, guionista o actor que intentan sacar una película adelante luchando contra los estereotipos y cánones de la época. Empoderante para las mujeres, con historias LGTB y con protagonismo de conflictos raciales.
6- La línea invisible (Movistar+)
Primera serie española del año. Producida con la gran calidad de Movistar+, esta miniserie da un salto hacia el pasado para contar la historia de cómo la organización terrorista ETA pasó de ser una asociación "pacífica" (lo más que hacían era poner pintadas y poner explosivos en lugares vacíos como protesta simbólica) a decidir acabar con la vida de una persona.
Yo no conocía la historia y me impactó. Fue un giro que definió la actitud de la banda y que cambió el rumbo de la historia española en una época convulsa. Los actores principales están de 10 y la ambientación es buenísima.
7- Upload (Amazon Prime)
Si me hubiese dejado llevar por la imagen de esta serie probablemente nunca la habría visto. Solo comenzamos a verla por estar en Amazon y tenemos el Amazon Stick TV. Pero tanto Mr. Preppy como yo nos alegramos muchísimo de haberlo hecho. ¡Nos la vimos en día y medio!
Es uno de esos argumentos difíciles de explicar. En un futuro no muy lejano, la gente que muere tiene la opción de "descargarse" en un mundo virtual de inteligencia artificial. Hay varias empresas que crean diferentes mundos (a diferentes precios y calidades) y sus usuarios son atendidos y vigilados las 24 horas por agentes de atención al público o ángeles. El protagonista muere debido a un accidente repentino y se descarga en el servidor de su novia, donde conoce a su ángel. La historia es a caballo entre una comedia romántica y una investigación de asesinato, pero siempre tiene un toque de diversión que hace que te rías en cada capítulo sin que pierda toda su seriedad.
Como ya he dicho, es difícil de explicar, pero os aseguro que es muy buena y que se ve en nada.
8- Little fires everywhere (Hulu)
O. M. G. Esta serie es brutal.
Protagonizada y producida por Reese Witherspoon (sello de calidad asegurado), esta serie se basa en la novela homónima de Celeste Ng. Y es que básicamente lo tiene todo. Maternidad, identidad sexual, feminismo, familia, raza... Es dura sin tener ningún tipo de contenido explícito.
La historia contrapone el mundo de Elena Richardson, la típica mujer blanca americana de clase media-alta, con el de Mia Warren, una mujer negra madre soltera con muchos problemas económicos y un pasado. Las cosas se van liando entre ellas y sus hijos a medida que los secretos de ambas familias van saliendo a la luz y un juez debe dirimir si una niña asiática, adoptada por un matrimonio amigo de los Richardson, debe quedarse con sus padres de adopción o volver a los brazos de su madre biológica, quien le abandonó cuando apenas podía darle de comer.
Todo lo que os cuente sobre esta serie es poco, os lo aseguro. Apenas pude quitar la vista de la pantalla. A mí me dejó con corazón en un puño y la boca así: .
9- Trying (Apple TV+)
Tierna, divertida, entrañable, entretenida... Esta serie de Apple TV, la primera que veo de la plataforma, me sorprendió de principio a fin. No sé qué me esperaba cuando la empecé, pero superó todas mis expectativas. Es una de esas series que te dejan con una sonrisa y una chispita cálida en el corazón.
La historia, titulada Ciclos en castellano, tiene como protagonistas a dos jóvenes ingleses que quieren tener un bebé. A pesar de sus esfuerzos, los intentos no dan sus frutos debido a la infertilidad de ella y a sus pocos recursos económicos, que no les permiten seguir con la fecundación in vitro. Después de la mala noticia se inician en el complicado mundo de la adopción, un proceso que les tendrá como en una montaña rusa de emociones.
10- El escándalo de Christine Keeler (The trial of Christine Keeler, Cosmopolitan TV)
La razón por la cual decidimos ver esta serie fue, simple y sencillamente, porque estaba en Movistar+. El caso Profumo me sonaba de haberlo escuchado en un capítulo de The Crown, pero nunca me había informado sobre el tema en absoluto.
La serie, aunque es lenta, es un buen modo de abrir una ventana al pasado para descubrir este caso. En resumidas cuentas: el ministro de guerra de Reino Unido, Jack Profumo, tuvo un affair con una chica de veintipocos, Christine Keeler, que acabó sacando al descubierto diversos secretos sobre hombre muy poderosos. Hubo varios juicios que fueron tan mediáticos que Keeler se acabó convirtiendo en una celebridad.
11- El club de las canguro (The Baby-Sitters Club) (Netflix)
Se trata de la adaptación de una serie de títulos infantiles que cuenta las aventuras de 5 chicas que crean El Club de las Canguro para ganar algo de dinero cuidando a los niños de su localidad. Aunque está principalmente pensada para un público más joven, la serie es encantadora. Los capítulos son cortos y muy entretenidos, así que te hace pasar un buen rato y te saca más de una sonrisa.
Sorprendentemente, es una serie más profunda de lo que, a priori, puede parecer. Mencionan temas importantes que no se han tratado mucho en otras ficciones y muestra a unas jóvenes muy concienciadas con los temas actuales. Eso por no mencionar que si en tu infancia te leíste los libros está clarísimo que la tienes que ver.
12- Space force (Netflix)
La nueva serie del protagonista de la mítica The office recibió mucho hype, aunque solo fuera gracias al pedazo de elenco, por lo que no dudé en darle una oportunidad. Lo cierto es que a mucha gente le ha decepcionado porque nada tiene que ver con el estilo de comedia de TO, pero a mí sí que me ha gustado bastante porque me ha parecido muy entretenida y con puntos graciosos.
Es una serie ligera, de capítulos cortos, de esas que ves para alejar los malos pensamientos del día. La trama sigue el nacimiento de la fuerza espacial de los Estados Unidos como una unidad más de su despliegue militar de defensa, donde científicos, astronautas y militares luchan para volver a llevar al hombre a la luna.
13- Yo nunca (Never have I ever, Netflix)
Empecé a ver esta serie en una tarde de aburrimiento y sin grandes expectativas, pero me gustó tantísimo que me acabé la temporada en esa misma tarde. Esto es fácil porque solo tiene 10 capítulos de entre 20 y 30 minutos cada uno.
La protagonista es una adolescente de origen hindú que se propone salir con el chico guapo del insti mientras tiene que lidiar con una familia de férreas tradiciones étnicas y con el trauma que le ha supuesto la muerte repentina de su padre, la cual sucedió delante de ella mientras actuaba con la banda del instituto. Aunque a priori pueda parecerlo, no es la típica serie adolescente. La ha creado la mismísima Mindy Kaling basándose en sus experiencias de juventud.
14 - Zoeys Extraordinary Playlist (NBC)
Desde Glee no había vuelto a ver una serie musical hasta este año. A diferencia de la ficción de Ryan Murphy, en este caso los números musicales no son tan relevantes, por lo que es completamente diferente. Lo que sí tienen en común es a Unique (los que vieron Glee lo entenderán) y el hecho de versionar canciones conocidas.
La historia sigue a una programadora de San Francisco que, tras un incidente, puede ver o imaginarse a los que la rodean interpretando canciones que muestran sus sentimientos y deseos más profundos, aquellos que nunca dicen en voz alta. Al principio está confusa, pero poco a poco empieza a verle el lado positivo al hecho de conocer lo que esconden los demás.
Ha sido una de las sorpresas de este año, la verdad. Me encanta y me ha hecho llorar alguna vez. Os la recomiendo.
15- Gambito de dama (The queens gambit, Netflix)
Fue el estreno de la temporada hacer muy poco y se mantuvo en el top de más vistos de Netflix durante mucho tiempo. Y, debo decir, muy merecido. Si no es la mejor serie de 2020 de las que he visto, se le acerca.
Cuenta la historia de Beth, una huérfana que aprende ajedrez en el sótano de un orfanato y descubre que tiene un talento innato para el juego, convirtiéndose en un prodigio desde pequeña. Aunque pueda sonar aburrido, no lo es en absoluto. El juego se muestra de una forma tan dinámica que te atrapa completamente y te sientes como en medio de la Champions en cada partida. Y sí, te da ganas de comprarte un tablero y aprenderte las diferentes aperturas modernas.
Anteriores a 2020
1- Sex Education (Netflix)
Si aún no habéis visto esta seriaza no sé qué hacéis aquí perdiendo el tiempo. Es difícil dar una referencia de serie que se parezca a esta (y que haya visto yo, claro), porque es única.
Ambientada en un instituto inglés, sigue la historia de un adolescente que, siendo el hijo de una conocida terapeuta sexual, no es capaz tan siquiera de masturbarse. No obstante, parece tener el don de dar buena orientación sexual a sus compañeros de instituto, por lo que una de sus compañeras, quien necesita dinero urgentemente, ve en él una oportunidad de negocio para abrir una consulta sexual clandestina para adolescentes. Su ayuda se vuelve tan necesaria que la noticia corre como la pólvora y ambos acaban haciéndose muy populares.
La historia no solo se centra en las relaciones personales de los protagonistas, a los cuales acabas shippeando a muerte, sino que en cada episodio te da una clase magistral de sexualidad. Aborda temas diversos como el feminismo, la transexualidad, el acoso, los clichés de género... Bueno, que me falta tiempo y espacio para contaros de las bondades de esta serie. ¡A verla se ha dicho!
2- Parks and recreation (NBC)
SÍ, LO SÉ, LO SÉ. Os estáis preguntando por qué he tardado tanto en ver esta maravilla de serie y cómo he podido vivir sin ella. Ni yo misma lo sé. Pero nunca es tarde, ¿no?
Para aquellos que, como yo, no la hayáis visto hasta ahora, es una comedia al estilo The office, The good place, Brooklyn 99... Vamos, de esas en las que no paras de reírte y te encariñas más con sus personajes que con muchas personas de tu propia familia. La protagonista es Amy Poehler y es la subdirectora del departamento de Parques del Ayuntamiento de Pawnee, Indiana. La descripción no le hace justicia para nada, la verdad. Que la veáis y punto, que es una cura para la depresión.
3- Veep (HBO)
Esta fue mi serie de la cuarentena. Nunca la había visto y me dieron gratis dos meses de HBO, así que pensé que era un buen momento para empezarla (y terminarla). Se ha llevado un montón de premios, sobre todo gracias a la interpretación de su protagonista, y se ha convertido en una de las comedias de culto recientes.
Para los que no la hayáis visto, es una parodia brutal de la política estadounidense. Sigue la carrera a la presencia de la "veep" o vicepresidenta de los EEUU, Selina Meyer, quien es capaz de todo por llegar al poder y mantenerlo. Creo que se embrutece con el pasar de los capítulos y al final acaba convirtiéndose en una comedia muy loca con poco sentido, pero merece la pena de principio a fin. Las risas están aseguradas y no hay cosa con la que no se meta.
4- Heathers (Paramount)
Y aquí mi otra serie de la cuarentena. No sé si tenía la pretensión de ser miniserie o si la cancelaron después de la primera temporada, pero yo la vi como si realmente fuera una miniserie y no creo que necesitase continuarse, a decir verdad. A mí me encantó. Me la vi en un suspiro y me reí mucho.
¿Habéis visto una película de culto de los 80 titulada Escuela de jóvenes asesinos? Yo no, pero al parecer en EEUU es tan famosa que tiene hasta un musical en Broadway. De hecho, en un capítulo de Riverdale hacen el musical en el instituto. Bueno, pues esta serie es la adaptación televisiva de dicha película. Al parecer, cambian un montón de cosas para hacer de ella una parodia moderna que se ríe de lo políticamente correcto y de la cultura americana que rodea a los adolescentes.
Como curiosidad os cuento que tuvo muy mala suerte, ya que Paramount la quiso emitir justo cuando se produjo una brutal masacre de estudiantes en un instituto americano y, claro, ninguna cadena quería una parodia de tal atrocidad justo después de cometerse. Así que se tuvieron que comer la ficción con patatas durante más de un año, hasta que había pasado el suficiente tiempo para que la gente no lo considerase una falta de respeto hacia las víctimas.
5- Workin moms (Netflix)
Os prometo que esta se ha convertido ya en una de mis series favoritas. Cuenta cómo les va la vida a un grupo de madres que acaban de finalizar su baja de maternidad y deben compaginar su vida laboral con dar el pecho y cambiar pañales. Así contado es bastante simplista, pero os aseguro que es una serie super divertida que habla sin tapujos de los tabúes de la maternidad.
Lo que más me gusta es que su protagonista es también su creadora y guionista y escribió el guion después de pasar por una depresión postparto. Su marido en la ficción también es su pareja en la vida real y fue él quien la animó a llevar a cabo el proyecto.
6- The end of the fucking world (Netflix)
Os voy a ser totalmente sincera: no tenía gran interés en esta serie y solo me la puse porque quería tener algo de fondo mientras hacía otras cosas. ¿Cómo acabó eso? Dejando lo que estaba haciendo para solo ver esta serie porque es una pasada. Es original, divertida, innovadora y muy entretenida. Se te pasan los capítulos volando y, cuando te quieres dar cuenta, ya te la has acabado porque solo son dos temporadas.
Los protagonistas son dos adolescentes infelices que deciden fugarse de casa repentinamente. Él cree ser un psicópata y ve en la idea de fugarse de ella el momento idóneo para pasar de matar animales a matar a una persona. Las cosas se acaban complicando y ambos acaban viviendo situaciones que jamás se habrían imaginado.
Que no os engañe esta descripción, os aseguro que es una comedia. El protagonista dice que ha matado animales pero eso no se ve nunca (que, personalmente, era algo que me preocupaba), ya que intercalan constantemente sus diálogos con monólogos internos. Además, la banda sonora de esta serie es brutalmente buena.
7- Fleabag (Amazon Prime)
Fresca. Atrevida. Original. Esta serie es diferente. No quiero decir por ello que sea una obra de arte, como se ha dado a entender por las críticas y la cantidad de premios que ha recibido, pero no es más de lo mismo. La vimos porque tiene mucha fama, pero a Mr. Preppy no le gustó demasiado. A mí me parece muy ingeniosa y divertida.
Sigue la vida de (¿?) Fleabag después de que su mejor amiga y socia pierde la vida intentando hacerse daño. Muestra sus relaciones familiares y amorosas mientras ella mantiene un diálogo constante con el espectador rompiendo la cuarta pared. Lo más famoso que tiene sucede, no obstante, en la temporada 2, pero no os contaré tanto.
8- The witcher (Netflix)
La vimos por culpa de esa promesa de ser "la nueva Juego de tronos", pero creo que no os hace falta que os diga que no es así. Comparte temática con la estrella de HBO, una fantasía medieval nacida de una saga de libros, pero poco más. A nosotros no nos ha terminado de convencer, pero seguiremos viéndola por el entretenimiento.
Geralt de Rivia es un brujo (que en el idioma de esta serie eso significa que es un mutante) que se dedica a viajar entre reinos matando a bichos feos para ganarse la vida. La cosa es que la vida se le complica y acaba en líos con una hechicera y una princesa. Y esto es todo lo bien que os lo puedo explicar.
9- Chicas buenas (Good girls, Netflix)
Esta serie podría ser la sustituta actual de Mujeres desesperadas. Bueno, casi. Las protagonistas también son mujeres y están desesperadas, concretamente porque necesitan dinero. Una vez que deciden recurrir al robo, su vida da un vuelco y empiezan a convertirse en criminales y a trabajar para una banda.
Es divertida, entretenida y la tensión sexual de los protagonistas es destacable. Engancha a medida que las tres mujeres van metiéndose más y más en líos hasta el punto de que quieres gritarle a la tv.
10- Una serie de catastróficas desdichas (A series of unfortunate events, Netflix)
Esta serie es, simple y sencillamente, una maravilla audiovisual. La escenografía, la luz, los planos, el guion, el vestuario, la interpretación, el elenco... Es una experiencia visual. La historia en sí, por otro lado, es la clásica que ya conocíamos, que corresponde a la serie de libros con el mismo nombre. La serie se ha realizado de forma que cada tomo son dos capítulos de la serie.
Para quien no conozca la obra, la historia sigue a tres huérfanos que pierden a sus padres en un incendio y van pasando de tutor en tutor mientras les persiguen la desdicha, la muerte y el horror. En primer lugar, van a parar a casa del Conde Olaf, un villano que les perseguirá a lo largo de toda la historia con el fin de hacerse con su fortuna. Este es el planteamiento básico, pero los niños van descubriendo secretos relativos a la vida de sus padres, pero de eso no os puedo hablar para no destriparos la trama.
Aunque con esta descripción puede parecer una serie oscura y triste, en realidad es más de comedia negra que de drama. Hay personajes divertidos y tiernos y otros que odiaréis a muerte. Pero eso sí, la historia nunca miente y lo dice desde el principio: no tiene un final "feliz".
11- Mindhunter (Netflix)
¿Si os digo que soy una friki de las cosas de crímenes me creéis? Pues es así. Estoy a una búsqueda más de casos reales de que se presente el FBI en mi casa. De hecho, mi parte favorita de trabajar en prensa era la sección de sucesos. Por favor, no os vayáis...
Como una buena serie de crímenes, Mindhunter me encantó. Pensé que iba a ser la típica de capítulos autoconclusivos en el que cada episodio es una investigación criminal, pero no. Está basada en hechos reales y cuenta la historia de un departamento del FBI encargado de analizar el comportamiento de los asesinos en serie (término que, por cierto, acuñaron ellos) con componente sexual para poder perfilar a futuros depredadores.
La serie está producida y dirigida en algunos puntos por David Fincher, así que es bastante cinematográfica y de buena calidad audiovisual. A día de hoy tiene dos temporadas y no se sabe si la continuarán algún día porque, al parecer, Fincher tiene otras cosas que hacer (sic).
12- El alienista (The alienist, Netflix)
Otra serie sobre crímenes, pues eso, lo que os decía.
En el Nueva York de finales del Siglo XIX a los psiquiatras se les conocía como alienistas, de ahí el título de la serie. El protagonista es un alienista que ayuda en la resolución de crímenes brutales porque le interesa descubrir por qué los criminales actúan de esa manera. Tiene dos temporadas y cada una de ellas se centra en un crimen. Siento no encontrar trailer de la temporada 1, pero con este os podéis hacer una idea igual.
Estas son todas las series que he visto en 2020, pero quiero hacer mención a una serie que vi en 2019 justo después de publicar este post y que es muy recomendable: Home for Christmas (Netflix). Es una serie noruega de capítulos cortos de temática navideña. La protagonista está harta de estar soltera en Navidad y que su familia le de la lata, así que intenta buscarse una cita para ese día. El argumento lo hemos visto muchas veces, pero es bastante diferente y merece mucho la pena. Es divertida y tierna, y te darán ganas de mudarte al norte de Europa.