En el aniversario del nacimiento de esta escritora londinense, te relatamos algunos de los detalles más extraños de su biografía, que te harán querer conocer más sobre este interesante personaje.
1) Su padre fue el encargado de su educación, pues su madre murió después del parto. Él se encargó de darle a Mary la mejor educación, por lo que estaba un paso adelante de las mujeres de su época. Esto le permitió ser dramaturga, filósofa y ensayista, y destacar en estos campos.
2) Estuvo casada con Percy Bysshe Shelley, con quien inició una relación mientras él estaba casado. Algo no muy bien visto en esa época (y en otras tampoco), por lo que su padre no aprobó la relación. Sin embargo, luego de que vivieron en Francia y viajaron por Europa con la hermanastra de Mary, volvieron a Inglaterra pues Mary Shelley estaba embarazada.
Su relación era reprobada por la sociedad de la época y debido al rechazo, así como a las deudas y preocupaciones constantes, la escritora perdió al bebé. Poco tiempo después, la esposa de Percy B. Shelley se suicidó, con lo que la pareja pudo casarse finalmente.
3) Su esposo murió durante un naufragio de su velero, durante una tormenta. Cuando la escritora lo supo, pidió que antes de que incineraran su cuerpo le sacaran el corazón. Después, ella lo conservó durante toda su vida, dentro de uno de los cajones de su escritorio, envuelto en una página de seda con algunas de sus cenizas y un poema de él. ¿¡Te imaginas!?
4) La obra de Frankenstein surgió durante un viaje que Mary Shelley realizó al lado de su esposo a Suiza, en donde se hospedaron en la casa de Lord Byron.
Durante una tormenta, Byron retó a sus dos huéspedes a que realizaran una historia de terror. La ganadora indiscutible fue Mary Shelley, pues además fue la única que terminó el relato. La escritora narró tiempo después que el entorno de Escocia, en donde vivía, le sugirió los paisajes y con eso creó la historia, pero fue la apuesta de Lord Byron lo que la animó a empezar y terminar el libro.
Cuando publicó este libro, la autora tenía 21 años, sin embargo su nombre no apareció en la primera edición, pues se pensaba que el público no estaba preparado para leer una obra escrita por una mujer. ¡!
5) Uno de los detalles más góticos de la escritora es que en alguna ocasión mencionó que había perdido su virginidad sobre la tumba de su madre. ¿Creepy? Pues lo es aún más, pues la escritora también recordaba que en ese sitio aprendió a escribir su nombre mientras pasaba su dedo sobre las letras de la lápida.
Ahora que conoces más de ella, no puedes dejar de leer su libro si aún no lo has hecho. Aquí te dejamos la portada de la primera edición, de 1818, como verás no tiene su nombre, pues como te mencionaba, fue hasta 1823 que decidieron darle crédito.