Los viajes a Sudáfrica no solo están reservados para los amantes de la naturaleza, la historia o la cultura africana.
También para los que disfrutan con la gastronomía descubriendo las elaboraciones más sorprendentes en los lugares más remotos del planeta.
La gastronomía sudafricana es el resultado de la fusión de las cocinas de diferentes países, como Holanda, Francia, Alemania, India o Inglaterra.
Por eso no difiere demasiado de la comida británica: podemos encontrar filetes, verduras cocidas, marisco, patatas fritas…
También tiene influencias de los esclavos africanos que llegaron a Asia, lo que completa una amalgama culinaria excepcional.
Si por tu cabeza ronda la idea de viajar a Sudáfrica, o incluso ya tienes fecha para hacer las maletas, no puedes perderte estas cinco elaboraciones tradicionales. ¡Están para chuparse los dedos!
En Sudáfrica debes probar
Bunny Chow
Es un pan rellenado con algún guiso con curry.
Es un plato que nace de la fusión de la cocina malaya y los esclavos que los europeos llevaron a Sudáfrica.
La elaboración tuvo su auge durante el apartheid, pues los restaurantes solo servían a los ciudadanos de raza negra comida para llevar.
Los bunny chow se convirtieron en una elaboración perfecta para el take away y su fama ha motivado a todos los restaurantes a disponer de una gran variedad de panes aromatizados.
Sambal
Es un condimento hecho a base de chiles y pimientos.
Puede comprarse hecho en supermercados, pero te recomendamos que los pruebes en algún punto de venta de comida o restaurante.
Aunque cuidado, asegúrate de la versión que pides: light o extra picante.
Frikadelle
No son muy diferentes a las tradicionales albóndigas españolas, al menos por apariencia.
Esta versión sudafricana, no obstante, pueden estar hechas de carne de res, cordero o pescado.
Tampoco faltan las especias que confieren un sabor único a este gran plato.
Boerewors
Son salchichas picantes que se pueden encontrar en casi todos los puntos de venta de comida, sobre todo en los eventos deportivos.
Se hacen con carne picada y especias, como nuez moscada, clavo, pimienta de Jamaica, semilla de cilantro o clavo.
Se sirven con pap, que son gachas tradicionales.
Koeksuster
Y, para terminar, el postre.
Los más glotones también tendrán su momento en Sudáfrica.
El koeksuster es un dulce en forma de trenza cubierto de sirope de azúcar.
La masa es parecida a la de un doughnut, así que es como un tipo de bollo.
Dulces, esponjosos, suaves… ¿Quién se puede resistir?
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