Mariah Carey
La cantante estadounidense (Huntington, 1969) lleva 11 guardaespaldas cada vez que va a un restaurante para que impidan que los demás comensales la vean comiendo. Para preservar sus cuerdas vocales se empeña en dormir con unos niveles propios de una sauna. Lo hace con 20 humidificadores alrededor de su cama y en los hoteles donde se aloja exige que haya grifería de oro y pueda estrenar la tapa de los inodoros.
La cantante tomándose un baño
Los zapatos de tacón son su perdición y la artista insiste en llevarlos siempre, incluso cuando va al gimnasio. Lo que aborrece es cumplir años (tiene 54), se niega a aceptar que está haciéndose mayor y a todos sus conocidos les obliga a que le digan que tiene 12 años. Su impuntualidad también es legendaria y oculta sus cirugías estéticas pagando con la tarjeta de sus empleados.
Manías de una excéntrica diva que tiene trastorno bipolar, pero a la que debemos un imprescindible en Navidad: su villancico.