Las personas que poseen un nivel educativo básico utilizan diariamente unas 300 palabras. Una persona culta e informada, sin embargo, usa unas 500 y en el caso de un escritor o periodista puede usar unas 3.000. El español se lleva la medalla de oro al idioma más rápido de hablar.
Las 300 palabras que usa un ciudadano en su día a día nunca son las mismas porque nuestro vocabulario cambia, avanza y se transforma, no se empobrece. Por eso la RAE incorpora a menudo nuevos términos que actualizan nuestro diccionario y el cambio es la única manera de que una lengua se mantenga viva.
¿Sabías que el español se utiliza en los 6 continentes, que Cervantes usó 8.000 palabras diferentes en su obra El Quijote o que más de 4.000 palabras nos vienen heredadas por el tiempo de dominación árabe?
Si una lengua es símbolo de identidad y pertenencia, cuidemos y respetemos la nuestra. No existe mayor riqueza cultural y lingüística.