En Irlanda, la mayoría de la población profesa el Cristianismo, concretamente la religión católica. Sin embargo, no se sancionan las prácticas de otras religiones. Al contrario, se respeta y se acepta ampliamente las otras religiones. No existe referencia alguna en la Constitución de Irlanda al catolicismo.
La creencia de la religión en Irlanda es reconocida, sin embargo ningún organismo religioso se da preferencia sobre cualquier otro y, de hecho, la Constitución deja en claro una garantía de no dotar a cualquier religión o imponer sanciones debido a la creencia religiosa.
Esta religión es profesada por más del 80% de la población. Y, según un estudio de la Universidad de Georgetown, el país tiene uno de los más altos niveles de asistencia diaria a misa en la cultura occidental.
A pesar de esto, se produjo un descenso masivo en la asistencia a los servicios religiosos, debido a que la Iglesia tuvo serios problemas con su imagen en la década de 1990, consecuencia de una serie de escándalos sexuales y cargos de encubrimiento contra su jerarquía.
Seguidamente, en 1995, los creyentes decidieron volver a legalizar el divorcio en la República.
La religión en Irlanda es también un símbolo de identidad nacional. Símbolos como el trébol de cuatro hojas, la cruz celta o la tradicional Fiesta de San Patricio son típicamente católicas.
Entre otras religiones, la segunda iglesia cristiana en número de adeptos es la Iglesia de Irlanda (anglicana) que, tras haber experimentado un descenso de fe la mayor parte del siglo XX, ha ganado recientemente seguidores, al igual que lo han hecho otras denominaciones cristianas menores y el Islam. Además, también son importantes otras vertientes cristianas como la Iglesia Presbiteriana de Irlanda o la Iglesia Metodista de Irlanda.
Y, debido a que comunidades judías vivieron en Irlanda durante la Edad Media, la variedad de ideologías es diversa. Igualmente el número de hinduistas o musulmanes ha sufrido un notable incremento, debido en gran medida a la emigración.
Incluso se toman en cuenta aquellos que dicen no pertenecer a ninguna religión, siendo esta aproximadamente un 4% de la población total de la Isla Esmeralda.
Por lo tanto, es adecuado concluir que la libertad de conciencia y la libre profesión y práctica de la religión, sujetas siempre a mantener el orden público y la moral, garantiza las creencias de todos los ciudadanos. Y, ninguna ley puede imponerse ya sea directa o indirectamente, para dotar a cualquier religión, o prohibir o limitar el libre ejercicio del mismo, así como dar ninguna preferencia a causa de la creencia religiosa o condición religiosa.
Hoy en día, encontrarás diversas religiones en la isla de Irlanda como es el caso del Budismo, el Hinduismo, el Islam, el Judaismo, Franciscanos, Dominicanos, Ateos entre muchos otros.