Como curiosidad cabe destacar que la paradisiaca isla de Aruba es uno de los territorios más pequeños del mundo, el cual, además carece prácticamente de relieve. Su extensión es completamente plana, salvo por pequeñas dunas, alcanzando su mayor altitud a los 188 metros. Igualmente, su clima tropical se mantiene todo el año, sin grandes variaciones.
La capital de la paradisiaca isla de Aruba es Oranjestad, la cual puede ser traducida por 'ciudad naranja', nombrada así en honor del gobernante Guillermo de Orange. Una de las visitas obligadas de esta urbe es el mítico Fuerte Zoutman, construido en 1796, momento en el que se estableció aquí su centro. Si algo caracteriza esta metrópoli es su vistoso color.
Las plazas, edificios y monumentos deslumbran no sólo por la luz que reflejan sino por las llamativas tonalidades con las que han sido pintadas. Azules, rosas y blancos iluminan la ciudad llenándola de alegría, que sumando a su densa vegetación hacen de este territorio un hermoso lugar que merece la pena conocer.
Una muestra de su hermosa naturaleza la apreciamos en el Arikok National Park. En su interior descubriremos una completa fauna y flora, desde cactus hasta palmeras. Tiene una extensión de 34 kilómetros cuadrados, lo que es aproximadamente el 18% de la isla. Durante nuestra estancia podremos practicar actividades tales como el buceo, navegar en kayak o explorar cuevas y grutas erosionadas por el agua.
¿Y tú, conoces Aruba? ¿Qué te ha parecido?
Roger4336/Flickr
Nestor´s Blurrylife/Flickr
Roger4336/Flickr
Apasciuto/Flickr