La idea de un mundo secreto de asesinos profesionales que se adhieren a un conjunto de convenciones civilizadas puede sonar absurdo, pero es lo que hace que este “Wickverse” sea más intrigante y mucho más rico que esas peliculas que te muestran a tipos rudos que se disparan y pelean solo porque si. Aqui además de buen estilo y clase hay honor y respeto entre ellos.
La Leyenda de John Wick
En la primera película vimos que él era el primero en lamentar el tener que volver a este mundo donde solo hay sangre y dinero de por medio, algo que a muchos llamó la atención es el grado de respeto que hay entre estos mercenarios cuando están dentro del hotel, ese pacto de no agresión dentro de él me sorprendió, es como este honor y respeto que existía entre los Samurái que tanto hemos leído en libros y en cuentos.
Pero bien, hablemos del personaje al que da vida Keanu Reeves, John Wick es una amalgama de influencias de películas de artes marciales y animé, que se notan mucho tanto en la fotografía como en la forma elegante de mostrar las escenas de acción donde Keanu se sale del mapa.
Pero como decíamos al comienzo, no solo es la leyenda de John Wick la que se siente especial en las películas, sino también el mundo de las mismas. Desde el misterioso y cautivante Hotel Continental, pasando por la galería de personajes secundarios.
John Wick, uno de los mejores personajes de acción
John Wick es un triunfo de la acción bien puesta en escena. Artes marciales, tomas largas y limpias, coloreadas en una preciosa fotografía. La escena del club nocturno es sobresaliente, y John Wick es un protagonista que queremos apoyar en su misión. El mundo del filme derrocha creatividad, sostenido en un muy buen guión con diálogos graciosos y tenso build-up al momento en que vemos por qué todos temen el nombre de John Wick.
Reeves es como un ronin embrujado (y en gran parte sin palabras) que vive del código del samurái del siglo XXI. Si, todo eso suena genial, pero quizas me quedo corto, también hay un montón de persecuciones automovilísticas, innumerables asesinatos a quemarropa y peleas muy bien conseguidas en las antiguas catacumbas de Roma. Y hay una larga lista de actores interesantes que siguen apareciendo para darle vida al baño de sangre.
Pero es Reeves, con sus trajes elegantes y su mirada gélida, quien te agarra por la pechera, en sentido figurado y literal. Matar es el negocio de John Wick … y él es el mejor en su negocio.
Al final de la película vemos que se encuentra “Excomunicado”, ahora se encuentra solo en contra de cientos de peligrosos asesinos que además de la paga quieren el reconocimiento de haber terminado con la leyenda del Baba Yaga, la próxima película tiene muy buena pinta y será el cierre a una de las mejores trilogías de acción de los últimos años.