Cómo ya sabeís me paso la vida rastreando en Instagram todo lo que me pueda parecer interesante, nuevo, fresco y que sobre todo, me sorprenda….se trate de fotógrafos para esta sección , de lugares originales para sugerir ó cualquier otro hallazgo.
A menudo los fotógrafos que me atraen no siempre son los que tienen las cuentas más populares ni con montón de followers. Este es el caso de Nacho Varela, con una de las galerías de Instagram más impresionantes de fotografías maravillosas realizadas desde ángulos y perspectivas muy especiales y que a mi parecer trasmiten una visión entre la frescura del hoy y la nostalgia de la fotógrafia de antaño.
Os dejo con su historia y obra, espero que me deis vuestra más sincera opinión,pero que sobre todo ,lo disfruteis.
Cuando Paz se puso en contacto conmigo para hablar sobre la posibilidad de compartir alguna de mis fotografías en su blog, me pidió que escribiese brevemente sobre mi historia con el mundo de la fotografía. Pocas veces me había planteado esa cuestión y una vez autoformuladas las correspondientes preguntas he encontrado más bien pocas respuestas.
Me encantaría poder contar una buena historia, de esas bien románticas, de mi idilio con ella desde la infancia, pero lamentablemente no es así.
Mi único contacto con el mundo de la fotografía hasta mi juventud fue a través de mi padre, aficionado a hacer fotos con una antigua reflex durante algunos viajes familiares. Gracias a eso tengo muchísimas imágenes de mi infancia de buena calidad, cosa que me parecío normal durante mucho tiempo y que luego descubrí que no era lo habitual en otras familias.
Puede que mi gran afición al cine (esto sí desde bien pequeño) también tuviese algo que ver con mi posterior interés por la imagen. Pero no podría ni mucho menos asegurarlo.
Mas allá de eso, no presté mucha atención a las cámaras de fotos hasta que un día de Reyes, mi madre me regaló una Nikon D60. Creo que fui yo el que la pedí, pero no recuerdo que fue lo que me empujó a hacerlo. La memoria no es mi principal virtud. Lo que sí recuerdo bien es lo bonita que era y las ganas que tuve de empezar a utilizarla. También lo difícil que me pareció, con todos esos botones y lo asequible que resultaba poner la ruedecita en el modo A. Encuadrar y disparar, nada más. Y así estuve años, encuadrando y disparando con éxito moderado. hasta que un día de verano soporífero hace solo dos años, empecé a ver tutoriales sobre el uso de las reflex en San Youtube.
Descubrí el juego que daba aprender a controlar mi cámara cuando utilizaba los modos manuales. Continué viendo videos día tras día y comprendí las ventajas del RAW y lo bonito que era el revelado posterior. Pero lo más importante, me di cuenta de lo crucial que resultaba en el aprendizaje salir a hacer fotos sin ninguna expectativa más que divertirme y las oportunidades que me brindaban las calles de Madrid como escenario.
“Lo importante no es la cámara”. Lo repetía un experto tras otro en los videos que yo veía. Mi Nikon se había quedado algo anticuada, pero tenían razón. Me acompañó durante muchos meses más en mis salidas y la exprimí como no la había exprimido en sus 8 años anteriores. Hace tan solo unos meses compré una Evil, más potente y con más prestaciones, con la que salgo casi cada semana, aunque mi vieja cámara sigue perfectamente guardada en su sitio, claro.
Comparto mi trabajo en redes sociales y he descubierto fotógrafos/as que hacen fotos impresionantes. Es un pozo sin fondo de referencias, aprendizaje, ideas y motivación. Es bonito sentirse principiante en este mundo y tener la sensación de que está todo por descubrir.acho_varela_photo