cada segundo que le cantaba gloria a tu boca,
cada segundo que manchaba tu piel al rozarte,
y ahora...
¿No sientes nada?
¿Ya no me sientes?
Ya no me soplas miradas,
no me profanas,
no me desvistes,
ayer, en mi durmieron tus caricias,
en mi boca,
tus sucias alas
Maldito sea el día en que nuestros labios perdieron el sentido,
maldito sea,
aunque después de ti,
quedo yo,
vestida de sueños,
impregnada aun en ti,
caminando en tu misma calle,
balbuceando tu nombre
Pero...
Aquella noche entre tragos,
esa canción sonó tanto a ti
que mis manos temblaron al marcar tu numero,
que mis ansias de ti estallaron el un "hola"
que yo,
me quede silenciada y aturdida a tu voz
¡Bésame, carajos!
Esta noche bésame,
que mis labios desean guardar tu lujuria,
desean cambiar la historia,
y así no tarareare los recuerdos,
así no solo moriré en el infierno,
si no en tus manos,
querido. Te quiero para una noche... Y luego otra, futuro.