En McLaren han quedado con la cara roja después de haber sido superados por sus viejos motores Honda en Bahrein. El novato Pierre Gasly, de Toro Rosso, con motor Honda, comenzará la carrera desde un quinto impresionante el domingo, mientras que Fernando Alonso ni siquiera llegó al segmento clasificatorio Q3.
El piloto francés ha querido acordarse de las críticas que recibieron tras la primera carrera, donde él mismo abandonó en las primeras vueltas por un problema de motor. "Podemos luchar", ha exclamado por la radio del equipo, en clara alusión al comentario que ya hizo Fernando Alonso al terminar la carrera en Australia.
Stoffel Vandoorne fue aún más lento, y ambos también estuvieron detrás del otro Toro Rosso conducido por Brendon Hartley en la jornada clasificatoria: "No tengo ninguna explicación. Obviamente no hemos hecho un trabajo lo suficientemente bueno", dijo Vandoorne. Fernando Alonso restó importancia a los problemas actuales de McLaren a raíz del divorcio de Honda. Y antes, el jefe Eric Boullier había dicho que el próximo objetivo de McLaren son los tres primeros equipos: "Es ambicioso, pero de vez en cuando deberíamos poder pelear con Ferrari y Red Bull", dijo.
Pero después del GP de Baréin, es difícil imaginarse a McLaren retando a Ferrari o Red Bull, ya que ahora no solo deben cuidarse de Haas o Renault, sino que, según lo vistoen la carrera qatarí, están en la estela de Toro Rosso Honda, y Gasly lo hizo saber cuando cruzó la meta en 4ª posición. "Ha sido increíble, cuarta posición en la segunda carrera con Toro Rosso-Honda", explicó el galo. "No soy consciente todavía. Desde el principio del fin de semana el coche ha ido fantástico, pero no podíamos imaginar estar en el Top 5. Hay que estar ahí, aprovechar las oportunidades y hoy la hemos cogido", concluyó.