Ir a la playa es uno de los mejores destinos de vacaciones donde viajar en verano. Es un destino que se adapta a casi todos los gustos y donde te lo puedes pasar realmente bien ya sea en pareja, con familia y con amigos; sin embargo, como todo en esta vida, viajar a la playa puede ser una pesadilla si no tomas las precauciones adecuadas. Aquí te dejo diez consejos para viajar a la playa y no morir en el intento.
10 consejos si viajas a la playa en verano
Usa ropa cómoda y ligera para el calor, además de gorra para el sol, pero nunca olvides llevar algo un poco más abrigado como una sudadera, en especial si vas por la tarde, ya que con el atardecer pueden bajar mucho las temperaturas y podrías resfriarte.
Haz caso a las señalizaciones de los puestos de salvavidas. Si hay una bandera verde significa que puedes bañarte, la amarilla significa que debes de tener precauciones y si es roja significa que es peligroso. Procura no bañarte nunca en una playa que tenga bandera roja.
Cuida tu piel del sol, la radiación UV puede ser realmente dañina para tu piel, a corto plazo te generará una quemadura terriblemente dolorosa y a largo plazo puede generar manchas e incluso cáncer de piel. No pases malos ratos debido a quemaduras, dosifica el tiempo de exposición al sol evitando la exposición directa entre las 11 y 3pm, usa suficiente protector solar. El protector solar ideal para los días de playa es de 25 FPS en adelante y se debe colocar al menos cada 4 horas. También es recomendable usar gafas de sol de calidad.
Lleva la comida refrigerada para que no se dañe con la exposición al sol.
Bebe suficiente agua. El calor y el agua del mar favorecen a la deshidratación, por eso es necesario consumir suficiente agua, al menos 2 litros por persona al día.
Si deseas tener un día tranquilo no escojas las playas cercanas a los centros urbanos, busca alguna un poco más alejada.
Una limonada fría es refrescante, pero lo ideal es no consumir cítricos cuando estés en la playa, si alguno cae a tu piel con la exposición al sol, esta puede mancharse.
Lleva comidas ligeras. Las comidas copiosas justo antes de nadar representan un verdadero peligro, ya que podrías sufrir un corte de digestión.
Aléjate de las zonas y playas donde se practiquen deportes náuticos para prevenir accidentes.
Nunca te bañes en una playa en la que haya medusas, aunque creas poder evitarlas. No te la juegues.
Si caminas sobre rocas usa zapatos adecuados para evitar resbalar y para evitar pisar algún erizo de mar, que puede resultar muy doloroso.