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Atrapados en la Red.
En la red, la llamamos así por que nos envuelve y nos atrapa me imagino, aunque seguro que existe otra definición mas acertada para la mayoría. pues bien en la red podemos toparnos con historias sorprendentes, inventos absurdos y comercializados, con enciclopedias, pero de las de verdad para informarnos de alguna duda.También existen estudios puestos al conocimiento público sin nada a cambio.Creo que es el único lugar en el mundo que la inmensa mayoría de personas somos altruistas en alguna medida. Unos bucean en sitios para poner lo que encuentran al alcance de los ojos de millones de personas que no sabrían localizar esa información, otros la leen y la dejan permanecer en la memoria, para utilizarla tiempo después cuando sea necesario.Ahora vemos todo esto muy normalizado. Hace doce años, que es el tiempo en que empecé con los PC e Internet esto no era exactamente así.Sí era el altruismo, no era así la información a borbotones que ahora podemos disfrutar y o padecer.Eran reductos muy pequeños en España. Si es que aquí no existía el Adsl, íbamos a 56k y rezando para que no se nos cortara la conexión. Las páginas a pesar de no estar tan modernas como ahora tardaban una eternidad en cargarse, los programas en castellano NI LOCOS, en inglés y se acabó. Los que sabían y tenían tiempo hacían verdaderas obras de arte traduciendo cada botón, cada menú, cada submenú de algunos programas, y todo eso simplemente por el afán de ayudar.El Google no era conocido aquí mayoritariamente como ahora, usábamos otros buscadores, los había monotemáticos, también existían lo que se denominaba directorios, que eran y son por que siguen existiendo, una recopilación más o menos extensa de enlaces.Otra herramienta que usábamos era un metabuscador, es decir un buscador que usaba los motores de muchos otros para localizar la palabra que se escribía. Uno muy conocido tenía de nombre Copérnico, estaba la versión gratis y la de pago, y entre otros muchos idiomas estaba en castellano, lo que era un gran alivio para que Dios no nos regaló el don idiomático.Los foros eran algo farragoso y que no eran tan usados como ahora, las salas de chat eran de otra forma, y la chicha, lo verdaderamente importante, de donde a mi parecer emanaba el poder de Internet era en el IRC. Con sus infinitos servidores, sus infinitas salas, su infinita capacidad de albergar gente muy, pero que muy creativa, a quienes los que no conocían denominaban hacker. Cuantas cosas de las que ahora disfrutamos y la mayoría no tiene ni puñetera idea de donde viene, han llegado de la mano de esos seres atípicos, extremadamente hábiles programando, infinitamente curiosos, y juguetones, mis adorados hacker, mis añorados nenes guapos.En ese mundo no estaban muchas chicas, alguna “conocí”, pero mi trato ha sido casi siempre con chavales, jovencitos todos ellos, algunos empezando la adolescencia para quienes yo en esa parte pequeña donde habité hace años era la abuelita.Tuve mucha suerte de haber tenido esas vivencias tan especiales de cuando teníamos menos cosas en la red, pero todos estábamos ya atrapados por ella, en mi caso sigo maravillada.
