Las estalactitas se forman cuando agua que contiene bicarbonato de calcio de la piedra caliza disuelto, gotea desde el techo de la cueva. Las estalagmitas crecen hacia arriba con las gotas que caen al suelo.
Cómo se forman las estalactitas y estalagmitas
La formación de las estalactitas se produce cuando el agua entra en contacto con el aire, es decir, cuando el dióxido de carbono, que se encuentra disuelto en el agua de lluvia, contacta con la roca caliza, constituida ésta casi en su totalidad por carbonato cálcico. El resultado de este contacto es una reacción química que hace aparecer el bicarbonato cálcico, sustancia muy soluble en el agua. Parte de ese bicarbonato de calcio se precipita hacia la piedra caliza y forma un diminuto anillo, que se va alargando hasta formar una estalactita.
El crecimiento de éstas es muy lento, estimándose que para crecer 2,5 cm se precisan entre 4.000 y 5.000 años. La estalactita más larga de la que se tiene noticia se encuentra en la cueva de Poll an Ionana, en Irlanda, y mide 6,20 m.
Las estalagmitas, por su parte, crecen hacia arriba y se forman por la caliza disuelta en las gotas de agua que caen al suelo. La mayoría, por tanto, aparece debajo de las estalactitas, a las que acaban por unirse, dando lugar con el tiempo a una columna.
La estalagmita más alta se encuentra en la cueva de Zhin Jin (China) y tiene 70 metros de altura.
Otras formaciones
Normalmente estas formaciones se producen en las cuevas por donde se filtra el agua (cálcicas), pero no siempre.
Las estalactitas pueden formarse en cualquier cavidad, natural o artificial, que tenga aportes de agua cargada de minerales que puedan precipitar. De esta manera, podemos ver pequeñas estalactitas en minas antiguas, o en tubos volcánicos de cierta edad, aunque son formaciones mucho más modestas que sus equivalentes en las cavidades cálcicas.
Pueden ser de materiales como el yeso, siendo en este caso conocidos ejemplares de varios metros de longitud. Si se forman a partir de sal no adquieren tamaños tan grandes por la forma de cristalización de este mineral.
El término estalactita se utiliza también para designar a los espeleotemas primarios de cuevas volcánicas que se localizan en el techo de la caverna. No obstante, dado que su formación es del todo diferente (la estalactita de lava se forma por goteo de lava fundida, en un período muy corto), se le prefiere denominar estafilito.
Estalactitas y estalagmitas pueden también formarse en techos de y suelos de hormigón, aunque su formación es mucho más rápida que en los entornos naturales de las cavernas.
Variedades
La variedades son muchas aunque algunas más habituales reciben nombre particulares, tales como: los macarrones, tubos rectos de unos milímetros con conducto interior, pueden alcanzar metros de longitud y su crecimiento puede dar lugar a una estalactita cónica clásica; las piñas o estalactitas bulbosas, que se forman cuando una estalactita crece sumergida, en parte, en agua; las estalactitas reflectadas o anemolitos, que se forman, según se cree, por corrientes de aire que hacen que la estalactita no crezca recta sino con una cierta curvatura; las ubres, nabos o remolachas, que no son realmente una variedad de estalactita sino, posiblemente, la unión de un escudo con una estalactita.
Las estalactitas y estalagmitas más espectaculares del mundo
Las grutas de Jeita se encuentran a 20 kilómetros de Beirut, la capital de Líbano, en el valle de Nahr al-Kalb. Están consideradas como una de las grandes maravillas naturales del mundo. Está compuesta por dos cuevas de piedra caliza, galerías en la parte superior y una pequeña cueva a través de la cual cruza el ?Río del Perro?, o Nahr al-Kalb. Las estalactitas y estalagmitas, ofrecen unas vistas espectaculares producidas por la erosión de las aguas contra la piedra. Fue nominada para votar entre las nuevas siete maravillas del mundo.
La Cueva de los Cristales Gigantes (Mexico). En esta cueva se encuentran los cristales de yeso más grandes del mundo. Descubierta en el año 2000 y considerada como ?una maravilla de la naturaleza?. Adquirió sus formas gigantescas debido a la temperatura que ha conservado durante miles de años, a poco menos de 58 grados durante mucho tiempo. El límite de supervivencia en esta cueva no sobrepasa la media hora.
La belleza y peculiaridad de la cueva del Lago Azul de Brasil reside en cuando los rayos del sol penetran en esta enorme cueva y se produce un mágico efecto que tiñe las paredes de azul y belleza. Un cristalino lago de 70 metros de profundidad y deslumbrantes estalactitas formadas por la acción del agua a través de los años, son la postal que caracteriza a esta cueva , en el estado brasileño de Mato Grosso do Sur.
La Cueva de Mogao (China) son un conjunto de 492 templos situados cerca de la ciudad de Dunhuang, en la provincia de Gansu de la República Popular China. Se las conoce también como las cuevas de los mil Budas, las grutas de Mogao o las cuevas de Dunhuang. En el año 1987 fueron declaradas por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad.
La Cueva Pozo Encantado (Brasil), se encuentra en el Parque Nacional Chapada Diamantina. Es uno de los puntos más visitados por los ecoturistas y recibe este nombre debido al fenómeno de las coloraciones de sus aguas cristalinas por efectos de los rayos del sol que a cierta hora del día ingresa por un resquicio natural de la cueva.
La Cueva de Cacahuamilpa (México). Dentro de la gruta hay túneles con una longitud de hasta 10 km. La altura de las grutas oscila entre los 30 m en la parte más baja y los 70 m en la más alta. Tiene 90 salones (cavidades muy amplias) iluminados artificial y naturalmente, cubiertas de concreciones calizas que cuelgan de su techo (estalactitas) y ascienden del suelo (estalagmitas).
Las Cuevas de Bellamar, a 100 kilómetros al este de La Habana, son famosas por sus especiales formaciones, restos marinos estimados en más de 25 millones de años, su flora característica y sus leyendas.
La Cueva de Cristal de las Islas Bermudas está situada en Hamilton, y es una de las mayores atracciones turísticas de estas islas. Está situada a 36 metros de profundidad y es una de las cuevas más grandes del mundo. Esconde el llamado Lago Cashow, que tiene un puente que lo cruza por debajo de las aguas. En las paredes superiores tiene unas formaciones rocosas impresionantes.
La Cueva de Waitomo (Nueva Zelanda), son unas cuevas de roca calcárea que forman grutas que tienen como mayor particularidad la existencia de un gusano luminoso en el techo de las cuevas, el cuál emite una luz brillante con la que atrae su presa acercándola a un hilo mucoso en el que el insecto atraído queda pegado con lo que el gusano retira el hilo y coge a su presa. Estos gusanos forman unos espectáculos de luz en las paredes de la cueva impresionantes.
La Cueva de Mira D"aire de Portugal es un recorrido subterráneo que discurre a través de una serie de cavernas iluminadas con colores muy vivos y tiene algunos espeleotemas impresionantes. La caverna pasa por 110m debajo de la superficie contiene un enorme lago con cascadas artificiales y fuentes.
También están la cueva Onondoga, en Missouri, Estados Unidos; la famosa Gruta de la Flauta de Caña en Guilin, en el sur de China, de 240 metros de largo; cueva Alisadr, en Irán; la caverna del Ciervo, situada en la isla de Borneo; la cueva Hugden Grotto, en Tennessee, acoge en su interior agua helada de una profundidad de más de 150 metros y tiene una estructura natural sorprendente.
Grutas en España con estalactitas y estalagmitas
Nuestra geografía cuenta con un impresionante patrimonio geológico del que destacan docenas de monumentos naturales en forma de espectaculares grutas o cuevas cuajadas de estalagmitas y estalactitas.
Algunos ejemplo pueden ser estos:
Cueva del Drach: Se extiende a lo largo de 2.500 metros de longitud, y es uno de los mayores lagos subterráneos. Con una amplia programación de conciertos, esta cueva en Portocristo es la más famosa de Mallorca, pero hay otras en la isla que también merece la pena conocer: como las de Artá, dels Hams o las de Campanet.
Gruta de las Maravillas: en Aracena (Huelva) cuentan con un recorrido de 1.200m y siguen siendo unas de las más hermosas y populares de la península. Muy cerca, en el sur de la provincia de Badajoz, se pueden visitar también las Cuevas de Fuentes de León (Declaradas Monumento Natural en 2.001).
Cueva de Nerja: Por sus formaciones geológicas, pero también por sus pinturas rupestres, se ha convertido en uno de los monumentos más visitados de la provincia de Málaga. Muy cerca, en el Rincón de la Victoria se puede visitar también la Cueva del Tesoro, de origen marino.
Cueva El Soplao: ubicada en el interior de La Florida, un complejo minero abandonado de la comarca de Saja-Nansa. Se ha convertido en una de las grandes atracciones de Cantabria.
Cueva de Valporquero: a 47 kilómetros de León. Es uno de los complejos kársticos más impresionantes de la península, sobre todo en época de lluvia o deshielo.
Grutas de Cristal: situadas en la localidad de Molino, en Teruel, representan la formación geológica subterránea visitable más significativa de Aragón con un desarrollo de 620 metros de longitud cuajado de estalactitas y estalagmitas.
Cueva de Canalobre: en Busot, a 24 kilómetros de Alicante, cerca de Benidorm, cuenta con una de las bóvedas subterráneas más altas de España.
Grutas de San José: se encuentran situadas Vall d"Uxó, en la provincia de Castellón. Forman parte del río subterráneo navegable con una longitud de 2.750 cuajados de formaciones curiosas.
Grutas del Águila: a 9 kilómetros de Arenas de San Pedro (Avila) ofrecen un recorrido de alrededor de un kilómetro cuajado de formaciones geológicas.
Cova do Rei Cintolo: cerca de Mondoñedo (Lugo) es la más grande Galicia y una de las más misteriosas e interesantes de la península.
Y así un un sin fin de ellas a lo largo y ancho de toda la Península. Algunas de estas cuevas ofrecen, además de las típicas visitas turísticas, otro tipo de visitas de carácter espeleológico o de aventura.