Campaña "Break The Silence" (rompe el silencio)
Son 55 las mujeres que han sido asesinadas en lo que llevamos de año en nuestro país, cuatro más que en todo 2014, cifra que esperemos no aumente en diciembre. Pero la violencia machista afecta más allá de nuestras fronteras. Cada hora una mujer rusa muere víctima de la violencia machista, 14.000 en 2014. Guatemala también ostenta uno de los mayores índices de feminicidios del mundo, 277 mujeres fueron asesinadas el pasado año a manos de sus parejas o exparejas, casi las mismas que en Argentina.
Campaña contra el maltrato psicológico en Pontevedra
En España desde que existe la ley integral contra la violencia de género (2005) se han tramitado más de 1.100.000 denuncias, los jueces han ordenado casi 250.000 órdenes de protección y han dictado 146.000 condenas por malos tratos.
El Gobierno, que acaba de pedir la implicación de todos contra esta lacra es, sin embargo, quien ha reducido año tras año las partidas presupuestarias destinadas a la Delegación del Gobierno para la Violencia de Género. Durante estos eternos cuatro años de gobierno popular se ha reducido el presupuesto en prácticamente 5 millones de euros y han sido asesinadas por violencia machista 200 mujeres. Pero es que además las estadísticas dejan fuera a madres, hermanas, amigas o parejas que no tienen vínculos directos con el asesino, requisito indispensable para figurar en las cifras oficiales. Si se sumaran las mujeres asesinadas por sus hijos o las prostitutas por sus clientes se duplicaría el número de víctimas, algo que no interesa en absoluto.
La violencia machista es un problema que afecta a toda la sociedad, por eso debemos ayudar en todo lo posible para su erradicación. No es de recibo matar a una madre, hermana, cuñada, suegra o amiga porque sí, porque es mía y de nadie más, ¿en qué cabeza cabe? Lo más importante es saber por qué se ha llegado hasta ese extremo. El asesinato de una mujer implica romper una familia y dejar hijos huérfanos, muchos de ellos menores, por esta sinrazón.
Campaña contra la violencia machista
La publicidad, el cine o los catálogos de juguetes tampoco ayudan demasiado en la tan deseada e inalcanzable igualdad. Los medios deberían prestar especial atención al tratamiento de la violencia machista y dar aún más visibilidad a esta lucha, porque lo que no se nombra, no existe. También llama la atención que una aplastante mayoría de docentes sean mujeres y que sigamos así. Su labor desde edades muy tempranas puede impulsar la igualdad a través de la prevención y la sensibilización. No nos olvidemos que la educación es el mejor instrumento para prevenir la violencia de género. Ejerzamos también nuestro derecho de exigir responsabilidades políticas, es cuestión de Estado.
25 de noviembre, Día Internacional contra la Violencia de Género