Los consejos de Francesc R. Ribes para mejorar cualquier modelo de bicicleta
Buenas cubiertas y cámara tubeless
Uno de los elementos de mayor importancia en la bicicleta son sus ruedas, por lo que para que nos sea lo más efectiva posible es que demos con las cubiertas que mejor se adapten a nuestras necesidades y mejor se adapten al cuadro.
Con una transmisión bien cuidada y protegida, la duración y la comodidad del rodaje en ruta vendrá de la calidad de la cubierta y de lo apropiado de su dibujo según el terreno, por lo que no debemos escatimar en este aspecto.
Respecto a la cámara, sobre todo si no somos muy maños en el manejo, reemplazo y reparación de ruedas, la solución tubeless nos puede ahorrar tiempo, disgustos, interrupciones de mal gusto y, una vez hecha la inversión inicial, también dinero.
Suspensión
Como sucede con el coche, según la buena amortiguación que le aportemos a nuestra bicicleta, menos sufrirá en nuestras rutas si vamos pasados de vueltas en cuanto a rodaje. Por ello, si no somos ni de rutas por carretera ni urbanas, optaría por no escatimar en una suspensión doble de muelle y aceite.
El inconveniente es que estas suspensiones restan ligereza a la bicicleta. En mi caso opté en su día por una con bloqueo para el asfalto que me permitía la versatilidad de pasar de rodar en Palma sin problemas, a abordar el Puigmajor. Si no somos de ruta de montaña, incluso recomendaría prescindir de ella o contar únicamente con una delantera.
Frenos
Para los frenos sigo siendo un clásico y uso unos V-Brakes. En su día (hablo de hace 15 años más o menos) eran toda una novedad, aunque ahora casi todas las BTT lo llevan integrado de serie. Son fáciles de reparar, los encuentras en casi todas las tiendas y talleres de repuesto y apenas ofrecen resistencias a menos que te encuentres en bajadas de puertos de montaña muy pronunciados.
Cuadro
Cambiar el cuadro no tiene mucho sentido, ya que en la gran mayoría de ocasiones ello nos puede salir incluso más caro que cambiar de bicicleta por una nueva. Además, la gran resistencia con la que están construidas los cuadros (la mayoría, de aluminio) hacen que incluso te los garanticen de por vida.
Por ello, a menos que el cuadro sea de acero y denote el paso del tiempo acusadamente (con oxidación, picaduras, etc.), ni lo consideraría incluso aunque queramos uno de titanio o fibra de carbono, ya que estas implementaciones tal como he indicado, supondrían prácticamente que resultara más conveniente comprar una bicicleta de gama alta.
Soy Francesc Robert Ribes: economista, entregado a seguir aprendiendo y enamorado de los pedales y las nuevas emociones. En este blog podrás conocerme y descubrir que hay vida más allá de los treinta. ¡Bienvenidos!