Se nos acerca el capítulo centenario de nuestro encapuchado favorito y las cosas están quemando en "Arrowland".
SINOPSIS:
Un nuevo peligro acecha a nuestro héroe cuando una serie de asesinatos indiscriminados aparecen en la ciudad, pero los indicios no apuntan a Prometheus si no a la posibilidad de que quien esté ejecutando estos asesinatos sea otro "Vigilante".
OPINIÓN:
Un capítulo de esos que parece que van destinados a lo que llamamos como relleno de la temporada, cosa normal en series de más de diez capítulos y al final...boom, nos sueltan el bombazo con el que casi ninguno/a contábamos.
Por partes, es un placer ver en acción a "Vigilante", que muchos sabréis es un personaje surgido de los cómics DC por obra de Marv Wolfman y George Pérez en 1983 y que no era si no un abogado que cansado del sistema , que permitió salir en libertad a los asesinos de su familia, decide imponer la ley a su manera...y visto lo visto, encaja perfectamente con la situación que se vive en la ciudad ahora mismo, así que anotad Adrian Chase como el posible nombre de este nuevo "anti-héroe".
Por otra parte tenemos nuestra ración de Konstantin Kovar en Rusia, demostrando a Oliver, que quizás no fuese buena idea el fiarse de Bratva, para matarle. Lo de Rusia, me parece un buen cierre a los flash-backs, puesto que ahora sí descubrimos porqué Oliver ha llegado a ese nivel de oscuridad y frialdad con la que actúa y seguramente lo comprenderemos mejor al final de la temporada. Por cierto, Lundgren lo borda, incluso con el acento.
Lo de las coreos de lucha, seguimos con el nivel muy alto, con lo que casi ni voy a mencionarlo porque me quiero quedar con dos apuntes, uno, que Quentin parece al fin decidido a resolver sus problemas con el alcohol, al entender que pueden dañar al entorno que le rodea ( recordemos que es uno de los señalados por Prometheus) y dos, ese final tirando por la borda las teorías de que el topo pudiese ser un policía y descubriendo que el topo-SPOILERS- está dentro del equipo y además es una persona de la que ninguno/a podríamos llegar a sospechar.
Como vemos, resulta que nada es lo que parece y las teorías que pudiésemos tener, hoy se han venido abajo, es decir, que esta temporada está colmando mis expectativas con holgura y espero a la semana que viene con muchas ganas.
Por José María Molano
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