El otoño es una de las épocas del año más especiales, una época especialmente romántica por sus connotaciones. Por esta razón, hacer una escapada otoñal puede ser una excusa perfecta para revitalizar la pareja.
1. Mayor intimidad
Una de las ventajas de viajar en temporadas en las que el turismo masificado no es evidente es que el gesto de dar un paseo romántico por una zona bonita, adquiere un mayor valor de intimidad. Una intimidad que es la que nutre el propio amor de conversaciones especiales.
2. Tiempo junto a la chimenea
Una de las imágenes de felicidad otoñal e invernal es estar en una casa rural en la montaña cerca de la chimenea. Es decir, el otoño es una estación de sensaciones. Pero el otoño no impone ningún tipo de límite a tu creatividad para viajar y puedes elegir aquella opción que más te guste, por ejemplo, puedes elegir un hotel con vistas al mar, hacer turismo de proximidad en tu localidad, hacer turismo cultural en la ciudad o cualquier actividad de este tipo.
3. Descubrir las ciudades con los colores del otoño
Esta estación también es perfecta para descubrir las ciudades con los distintos tonos del otoño que aportan una nueva atmósfera más nostálgica y bucólica a los destinos. Muchas parejas tienen muchas fotografías de vacaciones de verano en sus vidas, sin embargo, tienen pocas imágenes de otoño. Por esta razón, esta es una de las mejores excusas para disfrutar de un viaje otoñal y descubrir un nuevo destino.
Las emociones asociadas a un viaje son especialmente significativas puesto que esos recuerdos quedan en la memoria por toda la novedad que acompaña a esas vivencias respecto a la rutina cotidiana. Al estar lejos del estrés del trabajo también tienes una mayor disposición para enamorar, seducir y conquistar.
4. Ir contracorriente
Si te apetece poner en práctica el verdadero valor del romanticismo, entonces, no hagas algo solo porque lo hace la mayoría. Viajar en otoño te permite ir contracorriente de la tendencia social de dejar las mejores escapadas para el verano. No necesitas mucho tiempo para hacer un viaje inolvidable, un fin de semana puede ser suficiente porque el otoño te enseña algo importante: el tiempo parece que se estira cuando lo disfrutas de verdad y lo programas bien. Además, los viajes breves también son una buena fórmula para evitar las discusiones que pueden derivarse de la convivencia intensa de los viajes.
5. Potenciar la empatía con tu pareja
Un viaje es un marco de desarrollo personal muy positivo para mejorar el diálogo de pareja en una comunicación pausada y sin prisa. Un viaje es una oportunidad para centrarte en tu pareja y recibir el mismo feedback, creando un microcosmos romántico entre los dos. Una metáfora de la felicidad otoñal en pareja que puede recordarte que el verdadero amor es aquel que se cultiva día a día. Es decir, el amor en sí mismo es una metáfora del viaje.
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