Editorial: Roca Editorial de Libros
Páginas: 240
Encuadernación: Rústica
ISBN: 9788499185286
Precio: 14,50€
Sinopsis
Para treinta y cinco chicas, La Selección es una oportunidad que solo se presenta una vez en la vida. La oportunidad de escapar de la vida que les ha tocado por nacer en una determinada familia. La oportunidad de que las trasladen a un mundo de trajes preciosos y joyas que no tienen precio. La oportunidad de vivir en un palacio y de competir por el corazón del guapísimo príncipe Maxon. Sin embargo, para America Singer, ser seleccionada es una pesadilla porque significa alejarse de su amor secreto, Aspen, quien pertenece a una casta inferior a la de ella; y también abandonar su hogar para pelear por una corona que no desea y vivir en un palacio que está bajo la constante amenaza de ataques violentos por parte de los rebeldes.
Reseña
Aviso a los lectores del blog: se avecina una oleada de reseñas sobre obras de literatura juvenil y distopías a la que doy comienzo hoy con esta reseña.
La selección es la primera entrega de una… ¿trilogía?, ¿saga?, que según se mire puede estar compuesta por tres o cinco libros. ¿Por qué dudo entre trilogía o saga? Porque tenemos una primera parte claramente diferenciada con una protagonista (America Singer) compuesta de los tres primeros libros, y el cuarto y quinto libro, de los cuales el último aún no se ha publicado, cuentan una historia relacionada, pero con otra protagonista y en otro tiempo. En cualquier caso, hoy os hablaré del inicio de la saga.
Tenemos un mundo distópico en el que se encuentra Illéa, el país de origen de nuestra protagonista. Illéa nació a partir de lo que en otro tiempo fueron los Estados Unidos de América, que se convirtieron en Illéa tras ser invadidos. En este nuevo país existe un sistema social de castas que va del uno al ocho. Los unos forman parte de la casa real, mientras que los ochos son indigentes y viven en la pobreza. Los demás, se dedican a un determinado oficio según su casta. Contra más baja sea la casta, mayor será su nivel de pobreza y menor su calidad de vida. America Singer, una joven de diecisiete años, es una cinco: ella y toda su familia son músicos. Ella está enamorada de Aspen, un seis, con el cual mantiene una relación amorosa en secreto, ya que está prohibido que los jóvenes de castas distintas se enamoren y estén juntos.
Sin embargo, la cotidianidad de sus vidas acabará cuando anuncien que el príncipe Maxon, de dieciocho años, debe casarse con una chica, para lo cual se realizará La Selección: entre todas las chicas de Illéa de entre dieciséis y diecinueve años se seleccionarán treinta y cinco para ir a palacio, de las cuales el príncipe elegirá a una de ellas para que sea su esposa y futura reina. America podría presentarse para formar parte de La Selección, y aunque ella siente rechazo por esa idea, tanto su familia como su novio Aspen la animan a que se presente. Y ella será una de las elegidas.
Una vez en palacio, su precaria y dura vida dará un giro de 360 grados: rodeada de lujos, comida exquisita, vestidos y joyas preciosos… y compitiendo por el corazón del joven príncipe. Poco a poco, America irá notando que su amor por Aspen se empieza a tambalear a medida que su relación con el príncipe Maxon se va haciendo cada día más y más especial…
—No soy tan tonto como para creer que te has olvidado de tu exnovio. Sé por lo que has pasado y que aquí no te encuentras en circunstancias normales. Sé que crees que hay otras más preparadas para mí y para esta vida, y no quiero presionarte para que intentes adaptarte a todo esto. Yo solo... Solo quiero saber si es posible.
Era una pregunta difícil de responder. ¿Estaría dispuesta a llevar una vida que nunca había deseado? ¿A observar como iba quedando con las otras chicas para asegurarse de que no se equivocaba? ¿A aceptar la responsabilidad que tenía él como príncipe? ¿Estaría dispuesta a quererle?
—Sí, Maxon —susurré—. Es posible.
Una historia intensa y que no decae en ningún momento. Tiene un poco de todo: amor (triángulo amoroso incluido), amistad (una bonita amistad femenina, que va naciendo en esta entrega y se desarrolla más en el segundo libro, La Élite), acción (los ataques de los rebeldes al palacio, que aunque se dan en contadas ocasiones le aportan a la trama el toque preciso de tensión), y pinceladas de fantasía.
Uno de los principales atractivos de la historia es esa especie de reality show, en el cual, como si de un Gran Hermano se tratara, las chicas van siendo expulsadas poco a poco en base a sus acciones o a los sentimientos del príncipe. En estos casos siempre solemos tener nuestros favoritos, y yo personalmente sufría pensando que algunas de mis chicas favoritas fueran expulsadas, y al revés, deseando que algunas chicas fueran expulsadas. No se profundiza mucho en todas ellas, algunas solamente son nombradas, pero es inevitable coger cariño a alguna de ellas y odiar a otras.
En cuanto a los personajes, America me ha resultado una buena protagonista, muy humana en ciertas ocasiones, sensible y dura cuando debía serlo. Aspen es un personaje correcto, aunque no he simpatizado mucho con él. Sin duda mis favoritos han sido Maxon y Marlee, el príncipe y la mejor amiga de America. El primero, por sorprenderme con su ternura y su bondad, siendo el prototipo de chico perfecto para la inmensa mayoría de las chicas (una servidora incluída). Por otro lado, la adorable y jovial Marlee, que a pesar de estar compitiendo con America por el corazón de Maxon, crea un bonito vínculo casi fraternal con ella, convirtiéndose en mi favorita de las chicas de La Selección.
El libro, tanto por ser bastante corto como por su ritmo ágil y lenguaje sencillo, es perfecto para devorar en una tarde de aburrimiento, aunque más te vale tener en tu poder los siguientes libros de la saga, a no ser que quieras pasar los siguientes días o semanas con mono de La Selección, ansioso por continuar la historia y saber cómo se desarrolla ese curioso reality show real.
Tengo que ser sincera: no soy objetiva con este libro. Me ha encantado y me ha enganchado como hacía mucho tiempo que no me gustaba ni enganchaba ningún otro. No puedo ponerle pega alguna. Solo puedo animaros, si es que os atrae el magnífico mundo de la literatura juvenil, a que lo leáis, y estoy casi segura de que lo devoraréis y disfrutaréis como yo lo he hecho. Sencillamente genial y estoy deseosa por leer la segunda parte de la saga. Un 10, simplemente.