Un mismo viaje se puede hacer de mil formas diferentes dependiendo del viajero. Por supuesto el punto de partida suele ser económico, no todo el mundo puede permitirse pagar lujosos hoteles y restaurantes de estrella Michelín. Normalmente la mayoría de las personas viajamos con un presupuesto de X el cual tenemos que repartir según nuestras preferencias. Yo soy de las que prefiero reservarlo para experiencias y no en lujos. Por eso en mi próximo viaje, prescindiré esta vez de hoteles o apartamentos, para escoger el alojamiento más económico de todos: el hostel. Puedo entender que no todos estén dispuestos a escoger esta opción, como dice una amiga "para estar peor que en mi casa, no salgo", pero como a mi lo que puede es conocer lugares nuevos y vivir nuevas experiencias, pues aunque no esté tan cómoda como en mi casa, me compensa ese sacrificio.
Para hacer la estancia en el hostel más agradable, es importante añadir unas cuantas cosas a la maleta para estar más a gusto y porque un hostel no proporciona la comodidad de un hotel.
1. Toalla: muchos hostel ofrecen la opción de alquilar toallas si no llevamos la nuestra, pero yo recomiendo llevaros una toalla propia para la ducha y aseo. Primero porque es más higiénico y lo segundo porque te ahorrarás el alquiler de la misma. Yo utilizo una toalla de baño de microfibra que apenas pesa y no abulta más que 2 pares de calcetines.
2. Chancletas: siguiendo con el tema "ducha", es altamente aconsejable llevar un par de chanclas para la ducha. Las hay super baratas y además apenas abultan al ser planas.
3. Candados: el hecho de compartir habitación implica que tus cosas corren un cierto peligro de robo si las dejamos por ahí tiradas. Muchos hostel tienen taquillas individuales en las habitaciones (o fuera) pero no proporcionan candado, así que recuerda llevar el tuyo propio. Si tu maleta no tiene cierre de seguridad con contraseña, mejor cerrar la cremallera con un candado pequeño. Ojo con los candados de "los chinos", no valen para nada y con sólo mirarlos se pueden abrir, en cualquier ferretería encontrarás candados de calidad muy seguros.
4. Productos de aseo: recuerda llevar tus botes de gel, champú, etc. Como explicaba al principio, un hostel no proporciona productos de aseo como los hoteles. Si no facturas equipaje, cualquier líquido no podrá superar los 100 ml, mejor hazte con un set de botes pequeños rellenables para poner tus productos. En tiendas como Primark venden muy baratos o si no en Clarel tienen una sección con un montón de productos de aseo tamaño viaje a precios económicos.
5. Tapones y antifaz: si eres de sueño ligero mejor llévate algún par de tapones ya que si estás muy cansado y eres el primero en irse a dormir de la habitación, no podrás conciliar el sueño si hay gente charlando o entrando y saliendo. El antifaz va bien si te quieres dormir y no han apagado la luz.
6. Medicinas: esto es importante siempre que viaje, indistintamente del tipo de alojamiento. Añade siempre a la maleta tiritas para cualquier rozadura que te pueda salir del calzado, paracetamol en caso de dolores de cabeza e ibuprofeno para cualquier dolencia de tipo inflamatorio.
7. Pañuelos: puede ser que cuando quieras ir al baño no siempre haya papel higiénico, así que unos cuantos paquetes de pañuelos pueden salvarte de algún apuro.
8. Cargador de móvil portátil: cuando te alojas en un hostel normalmente vas sólo a dormir, mientras que pasas todo el día fuera de turismo. Así que si tenéis un cargador de móvil portátil, te aseguras que no te quedarás sin batería en tu móvil durante el día.
9. eBook: aunque el objetivo del hostel es también conocer otros viajeros, es posible que te apetezca relajarte un rato y descansar. Para mi leer un libro es fundamental, además me ayuda por la noche a conciliar el sueño, así que recomiendo llevar un libro o ebook (abultan muchísimo menos). Si la pantalla no tiene iluminación mejor llevar también una luz LED con pinza para acoplar al ebook y así no molestar a los compañeros de habitación si están durmiendo.
10. Abrir la mente: esto no es algo que tengas que añadir a tu maleta si no más bien a tu cabeza. Alojarse en un hostel tiene algún aspecto negativo, no voy a negarlo, pero hay que disfrutarlo porque tiene muchas cosas buenas. Y sólo lo conseguirás abriendo tu mente a nuevas experiencias y situaciones.
¿Utilizáis este tipo de alojamiento? ¿Qué tal la experiencia? ¿Hay algún producto/accesorio que recomendáis añadir a la lista?