Sin embargo, La favorita está lejos de ser una simple película basada en personajes históricos; por el contrario, es un acercamiento irreverente, divertido y crítico que —si bien tiene como telón de fondo a personajes reales— busca mostrarnos
Con el sarcasmo de sus películas anteriores, en esta ocasión el director griego nos permite asomarnos a una historia dominada por las mujeres: la reina Ana Estuardo (Olivia Colman) y dos de sus ayudantes más cercanas, la duquesa Sarah Churchill (Rachel Weisz) y la plebeya Abigail Masham (Emma Stone).
Nominada a diez premios de la Academia, La favorita se coloca entre las películas que podrían llevarse más galardones al lado de Roma, de Alfonso Cuarón. Sin embargo, en La favorita destacan además las actuaciones de tres mujeres con rostros mucho más familiares para la industria de Hollywood.
La reina Ana —una mujer enferma, desvalida y caprichosa que se irrita con lo más mínimo y que ostenta en sus manos el futuro de Inglaterra y de Europa— es llevada a la vida por la brillante actuación de Olivia Colman. Una mujer que detrás de los conejos y los berrinches es consciente de su poder y lo maneja en medida del beneficio que pueda obtener de él.
Por otra parte se encuentra Sarah Churchill, duquesa de Marlborough, quien es el brazo derecho de la reina y a la vez la única persona que se permite ofender a la reina diciéndole la verdad. Es al mismo tiempo la única persona capaz de hacerla entrar en razón, lograr que se olvide de los males que la aquejan y hasta satisfacerla sexualmente.
La aparente armonía de la relación entre Ana y Sarah será interrumpida cuando llegue a la escena Abigail Masham, una mujer que sabe lo que desea y que intentará conseguirlo cubriendo su astucia y malicia de dulzura.
En esta película, las mujeres que la protagonizan tienen en sus manos el destino de una nación. Lo que en la superficie es un duelo de celos encierra un interesante juego de poderes en el que dos mujeres pelean para ver quién determina el curso de Inglaterra.
Con pronunciados grandes angulares, Yorgos Lanthimos enfatiza los enormes y lujosos espacios en los que se desarrolla la cinta.
Con el uso de este tipo de lentes y poniendo énfasis en bailes contemporáneos realizados en la corte, o con los gestos de Emma Stone al hacer de monstruo, el director griego acentúa ese tono extraño de sus cintas, presente en sus dos películas anteriores con la inexpresividad de los personajes, pero que en La favorita nos hace salir de la atmósfera de época.
El director nos recuerda constantemente que si bien es una película de época, la cinta está realizada en la actualidad, y que es desde ese punto que se aproxima a los pesonajes.
Con las 10 nominaciones al Oscar, La favorita se consolida como una de las mejores cintas de la temporada de estrenos, y no te la puedes perder luego de su estreno en cines este viernes 1 de febrero.