Esta cafetería la descubrimos el año pasado gracias al grupo de lactancia y crianza de La Safor al Pit al que pertenezco, porque colaboraron con el mismo haciendo una promo a las socias, y a raíz de eso un día me pasé y descubrí una cafetería muy molona con unos cupcakes fabulosos.
La decoración de a cafetería me encanta, sencilla pero muy acogedora, es como teletransportarme a un espacio que me recuerda mi niñez.
Al fondo de la cafetería encontré un espacio fantástico para que jugara Sandra con peluches, juguetes y pinturas ¡el paraíso de cualquier niño!
Y lo mejor de todo poder tomarte un café sin preocuparte si tu peque corretea por cualquier parte de la cafetería o molesta a cualquier otro cliente, ya que esta súper entretenida en su espacio, y siempre hay algún que otro niño para jugar.
A mayores tienen un brunch casero y delicioso los viernes y sábados en forma de bufet, los que me seguís por facebook ya habéis visto fotos en alguna ocasión ;)
Si queréis más información os dejo aquí su página web para que echéis un vistazo, por cierto también hacen tartas por encargo geniales para celebrar cumpleaños o lo que queramos, ya que nos la hace 100% personalizada.
Yo con lo golosa que soy no tardaré en volver a ir por allí.
Un abrazo!