Tessa Randau
Querido diario:
Quiero dar las gracias a la editorial Maeva por este ejemplar.
Sinopsis:
Si sigues tu brújula interior, llegarás a tu destino con los ojos cerrados.
Aunque aparentemente tiene una vida perfecta, la protagonista, una mujer joven y madre de familia, se siente agotada y le cuesta conciliar trabajo y familia. No es feliz y se pregunta por qué. Un día, mientras pasea por el bosque y recapacita sobre su vida, conoce a una anciana que le habla de las cuatro preguntas de la vida, que tienen el poder de cambiarlo todo para mejor. Poco a poco, la estresada madre de dos niños pequeños abandona su escepticismo y entra en el juego. Cuanto más se atreve a realizar el experimento que la anciana le propone, más puertas se abren. Pero ¿de verdad está preparada para contestar la última pregunta, la más importante de todas?
Las cuatro preguntas son...
¿Realmente quiero hacer eso?
¿Cuán importante es eso realmente?
¿Qué es lo que en realidad necesito?
¿Me gustaría seguir viviendo como hasta
ahora si solo me quedara un año de vida?
Si te fijas, en la portada del libro verás que pertenece a la editorial Maeva, Maeva Inspira concretamente, y eso nos da una pista de lo que vamos a encontrar en el interior. Porque sí, lo importante siempre está en el interior y esto lo podemos aplicar tanto a personas como a libros.
Nos encontramos ante un libro que está a caballo entre una novela de ficción muy breve pero intensa y un libro de crecimiento personal. Son enseñanzas que te puedes tomar como una historia tierna cargada de emociones o bien utilizarlo a tu favor porque... ¿Quién no se ha sentido nunca como nuestra protagonista? Montones de veces. Vas por la vida creyendo que lo tienes todo pero algo falla, algo te falta, algo te sobra ¡y lo peor es no saber qué es! Ahí entra este libro y su historia a jugar un papel muy importante.
Los libros nos salvan a menudo de muy diferentes maneras, unos nos dictan una receta de cocina o son un manual de primeros auxilios, otros son historias de ficción que nos absorben y nos alejan de nuestra realidad durante unos minutos y otros, como este, tienen pinceladas de amabilidad, nos hacen sentirnos identificados y nos acompaña en un proceso.
A veces nos encontramos ante grandes vicisitudes, esos cruces de caminos con grandes decisiones, pero otras muchas veces no es eso, es una sensación de: algo no va como debería de ir, supuestamente lo tengo todo y no soy feliz, debería pero no es así ¿y por qué? Bueno, de momento te invito a hacerte esas cuatro preguntas, no me las respondas a mí, sé sincero contigo mismo, eres la única persona que debe darse explicaciones a si misma. Y si te pica la curiosidad tienes este libro de poco más de cien páginas que te reconfortará en tu proceso ante la búsqueda de respuestas. Apúntalo, hazme caso.