Mitch Albom
Querido diario:
Hoy mi agradecimiento se va para la editorial Maeva porque me permite disfrutar de maravillas como esta:
Si realmente has querido a alguien, encontrarás el modo de volver a verlo.
Después de quince años, los 100.000 lectores de Las cinco personas que encontrarás en el cielo descubrirán el destino de Annie, su protagonista.
Una historia llena de fuerza y amor que demuestra que cada final es también un nuevo principio.
Hace quince años, los lectores de todo el mundo se enamoraron del protagonista de Las cinco personas que encontrarás en el cielo. Ahora Mitch Albom revela lo que le sucedió a Annie, la niña a la que Eddie evitó que atropellaran. ¿Cómo cambió su mundo después del accidente? ¿Y qué sucederá cuando finalmente haga su último viaje y se reúna con el hombre que le salvó la vida?Antes de empezar a dar mi opinión voy a facilitaros la portada y sinopsis del libro anterior:
Eddie tiene 83 años y trabaja en el parque de atracciones de una ciudad de provincias norteamericana. Ha pasado toda su vida en este lugar, a excepción de su participación en la Segunda Guerra Mundial, un episodio que le marcó profundamente. Su vida acaba de forma trágica al salvar a una niña que está a punto de ser atropellada por un coche de la montaña rusa. Eddie se encuentra ahora... en el cielo. El paraíso aparece como el lugar donde, por fin, entendemos el sentido de nuestra vida en la tierra. Así, Eddie se encuentra con las cinco personas que más han influido en su vida, de forma directa pero también indirecta, sin que él se diera cuenta. Y así surgen dos preguntas capitales: ¿De qué manera nuestra vida está ligada a la de gente que no conocemos? ¿Cómo influyen nuestras decisiones en la vida de otras personas?Este libro te despierta emociones, quieras o no, seas creyente o todo lo contrario, porque habla de una forma sobre la vida, la muerte y la espiritualidad que te hace pensar, te lleva a reflexionar y eso no lo consigue cualquier libro.
Es duro, lo sé, pero me encantan este tipo de historias. A veces nos sucede que no pensamos en la muerte hasta que alguien de nuestro alrededor o nosotros mismos estamos más cerca de ella incluso con un pie en la puerta, en esos momentos no sabemos qué hacer, qué pensar y toda nuestra cabeza está llena de preguntas.
Aquí encontrarás alguna de las respuestas y seguro que muchas más preguntas, porque por desgracia, en esta sociedad no nos enseñan a manejar el duelo, no se nos educa en la muerte, solo en la vida, no se nos permite estar tristes ni se nos enseña a aprender de esa misma tristeza, no hemos entendido aún que el dolor forma parte de nuestra naturaleza y debemos encontrar la forma más constructiva de afrontarlo en lugar de rechazarlo. Por eso este tipo de libros tiene un lugar especial entre mis momentos lectores.
Hay cosas como superar una tragedia o enamorarse que no se pueden forzar por mucho que queramos, hay hechos que necesitan su tiempo y debemos entender que tienen que seguir su curso, es muy duro, pero cuando entiendes ésto, empiezas a valorar mucho más todo lo que te rodea, aprecias lo que tienes y no te centras tanto en desear lo que no tienes.
Podría seguir hablando durante horas de estos temas que me sugiere el libro porque me parecen fascinantes pero también entiendo a aquéllas personas a las que les pone un nudo en la garganta y pido disculpas si me he puesto algo intensa, pero disfruto tanto de este tipo de historias que no puedo más que recomendarlas.
¿Te gusta? Cómpralo haciendo click aquí.