El amor de una madre parece que puede contra cualquier adversidad. Y si hablamos de la historia que se relata en ¿Quién le zurcía los calcetines al Rey de Prusia mientras estaba en la guerra? la expresión adquiere total significado.
Michel sufrió un accidente que le dejó incapacitado siendo adolescente. Desde entonces, su madre Catherine se ha convertido en la guardiana de su hijo, teniendo que estar absolutamente pendiente de sus necesidades. Michel tiene ahora cuarenta y tres años, y la señora Catherine resiste día tras día del modo más humano posible: disfruta de su hijo al que ama, pero en ocasiones pierde los nervios, añora disponer de libertard, envidia ligeramente a su hermana cuando su sobrino la lleva al cine... y lo peor de todo, se está haciendo demasiado mayor para cuidar de Michel.
Los días se suceden entre partidas al cuatro en raya, la programación televisiva y pequeños momentos que se salen de lo habitual, y que también vemos reflejados en el cómic. En definitiva, un drama familiar con una nota de optimismo que te emocionará, tanto para bien como para derramar alguna lagrimilla.
Cierto es que carece de un guión propiamente dicho: se relatan, como comentaba antes, diversas escenas cotidianas de la vida familiar, pero sin demasiada conexión entre ellas. Se nos permite conocer mejor a Michel y a Catherine, pero no da la sensación que tengan un hilo conductor hasta llegar al final del cómic. Sin duda, una lectura muy recomendable.
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