Jaume Funes
Querido diario:
Quiero dar las gracias a Edición Anticipada por este ejemplar.
Sinopsis:
En un momento u otro de la vida aparece el dolor. Las experiencias positivas, las habilidades aprendidas y la proximidad activa de otras personas suelen ayudarnos a superarlo. Pero no siempre es así, y el malestar de vivir encajados en una existencia que no deseamos hace que todo se trastorne.
Sea cual sea la situación, se trata de alteraciones de una parte de la salud, la mental, para la que no hay acuerdo sobre cómo describirla, cómo explicarla, cómo dedicarle la atención adecuada, y así nos hallamos inmersos en una especie de supermercado de las terapias, en una gestión interesada de los fármacos, en una ausencia de escucha y acompañamiento.
Este libro pretende ayudar a tener una visión personal más coherente sobre la salud y las enfermedades mentales; compartir un discurso social que aporte y que no segregue; ampliar el grupo de los profesionales que comparten una visión integradora y que dan respuestas que humanizan; exigir a nuestros responsables políticos una planificación coherente y no la venta de etiquetas y servicios etiquetados para curar las enfermedades mentales.
Esta semana abrí un debate sobre libros de autoayuda en mi cuenta de Twitter y descubrí algunas cosas de las que me gustaría hablar aprovechando que nos encontramos en esta reseña. Bueno, un apunte: ahora a los libros de autoayuda los llaman "de crecimiento personal" pero viene a ser lo mismo.
Yo siempre he defendido estos libros como una de las muchas herramientas que tienes a tu alcance y que debes utilizar en tu favor adaptándolos a tus circunstancias personales. ¿Qué sucede? aquí la gente comete varios errores. El más común es pensar que solo con terminar de leer el libro todos tus problemas se habrán resuelto mágicamente y eso no es así. Los libros te darán una explicación, un punto de partida, te mostrarán ejemplos a seguir y finalmente te van a proponer pautas y ejercicios para que pongas en práctica. Otro error común es pensar que tienes que hacerlo todo al pie de la letra. A ver, tampoco es un manual de instrucciones.
También he encontrado a personas que decían no servirles para nada cuando el problema era que habían elegido el libro inadecuado, ojo con esto. Por otro lado están los que no han reconocido su problema, aún no tienen intención de superarlo y le echan la culpa al libro de empeorar su situación ya que se comparan con los ejemplos redactados y les da la sensación de que el libro les sermonea.
Yo os diría que toméis de los libros de autoayuda lo que necesitéis pero sin obviar otras herramientas, como las de un profesional, hábitos de vida saludable, familia y amigos, así como todo lo que os hayan aconsejado a modo particular. Entonces, ¿los libros de autoayuda resuelven todos tus problemas por sí mismos? Está claro que no. Pero te ayudan a solucionarlos por ti mismo a través de pautas, directrices, ejercicios y propuestas a modo de deberes. Son soluciones a largo plazo y por supuesto la persona que debe solucionar sus problemas eres tú mismo. Y siempre, siempre, siempre, acudid a un especialista.