Kate Beasley
¡Mil gracias a Puck, el sello de la Ediciones Urano que me ha hecho llegar esta maravilla de libro! No me podéis negar que tiene una portada preciosa, tanto como su interior.
Gertie es una niña de quinto curso, el problema para ella es que aún no es la mejor de su curso y es lo que se va a proponer este año pues necesita que su madre la vea triunfando y valiéndose por sí misma pues Gertie lleva toda su vida viviendo con su padre y tía Rae ¡ah, y con la pesada de Audrey! que no entiende que las niñas de cinco y diez años no pueden jugar a lo mismo. Junto a sus mejores amigos intentará por todos los medios ser la niña más lista, la mejor y la primera de su clase, algo que desde el principio parecía algo muy fácil y... no lo va a ser.
Gertie me ha recordado mucho a la niña que un día fui. Si algo me puede dar mucha rabia es que, de adultos, olvidemos lo importante que era deslumbrar a la profesora, que nos dejaran elegir asiento en la clase o que nuestros padres entendieran que nuestro trabajo de ciencias tenía que ser el mejor de todos. No podemos avanzar sin echar de vez en cuando la vista atrás y darnos cuenta de cómo se ven las cosas desde puntos de vista diferentes y ésto es lo que nos hará educar mejor a las nuevas generaciones, utilizando la empatía para dar ejemplo.
Me voy a quedar con una frase que he compartido en redes sociales: -Estás tan empeñada en conseguir lo que no tienes, que no valoras como es debido lo que tienes-. Y para mí son las palabras que resumen perfectamente los sentimientos que se transmiten en todo el libro pues al final lo que verdaderamente importa es disfrutar del aquí y el ahora con todo lo que tenemos, pues está bien luchar por lo que queremos pero de nada nos sirve si no valoramos lo que ya hemos conseguido.
Fuente: este post proviene de Diario de una Chicka Lit, donde puedes consultar el contenido original.
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