Reseña #308. H, de J. C. Surt

H

Editorial: Letrame
Páginas: 350
Encuadernación: Tapa dura
ISBN: 978-84-17396-63-3
Precio: 19,00 €
Sinopsis
Durante finales de los años 30 hasta mediados de los 40 del pasado siglo, todas las miradas estaban puestas en Europa, principal foco de acción de la mayor guerra que haya vivido el hombre. Muchas eran las fuerzas que intentaron acabar con el genocidio nazi. Ejemplo de ello fue el complot ideado por oficiales alemanes, una conspiración que pretendía el asesinato del líder nacionalsocialista y tomar el control de ejército y Estado mediante la ejecución del Plan Valkiria. Sin embargo, antes de llegar a ello, el coronel Claus von Stauffenberg decide viajar hasta España con el fin de reclutar a un asesino retirado. La misión planteada es la de capturar al Führer para llevarlo ante la justicia, una ardua tarea que contraerá graves consecuencias para el profesional.

Paralela a la ambición de poder y conquista, los nazis se empleaban a fondo en la búsqueda del secreto de la raza aria, el cual relacionaban directamente con el continente perdido de la Atlántida. Al frente de la sociedad Ahnenerbe, Heinrich Himmler, con la ayuda del historiador Herman Wirth, descubre la relación entre las runas encontradas en objetos pertenecientes a la antigua civilización y la obra literaria del profesor británico J. R. R. Tolkien.

La muerte más esperada de la historia, la del dictador Adolf Hitler, en realidad solo supone el inicio de una nueva era de caos en un mundo que vive bajo las condiciones de un viejo tratado de paz entre razas (humanos, hombres-sapo, elfos, enanos, gnomos y trolls), una débil armonía que se ve truncada por los actos de un gobernador sin escrúpulos que hará despertar un odio que jamás llegó a desaparecer del todo.

Reseña
Una novela que aúna historia de la II Guerra Mundial con fantasía de Tolkien sobre una base de crítica social.

Es quizás el libro que más veces me he leído desde que empecé el blog. Tuve la gran suerte y el honor de ser uno de los lectores del borrador y la verdad que me gustó mucho. Luego, tras su salida, pude leerlo gracias al autor (con dedicatoria incluida). Pero la memoria de las prácticas y el TFM pararon su lectura a falta de 50 páginas, teniéndolo que volver a leer tras todo concluido. Y si encima le sumamos que en las vacaciones me lo quedé en casa olvidado junto con mi ordenador, sale esta reseña tan tardía. Por lo tanto quisiera pedir perdón.

Entremos al lío. Si bien H parece una novela más sobre la Alemania nazi y la II Guerra Mundial, nada más lejos de la realidad. Podríamos decir que está a salto de caballo entre una ucronía y la fantasía más puramente tolkieniana. Por lo tanto, es una novela en la que muchas cosas son reales y otras muchas son invenciones y licencias que el autor toma, cosa que explica al inicio y también en las notas a pie de página. Ejemplo de esto es que, en la novela, se sigue la línea de que Hitler era un ferviente católico.

En muy resumidas cuentas, la historia tiene dos grandes escenarios: fechas antes a la Operación Valkiria en la II Guerra Mundial y Halle, ciudad del planeta Hinos, inspirada en la Atlántida y en la obra Tolkien. Cada escenario, a su vez, posee numerosas historias que al inicio transcurren independientes para luego juntarse. El el caso de la primera, ocurren las aventuras de Cervantes -un asesino español actualmente algo depresivo encargado de capturar a Hitler-, los pasos de Hitler en la II GM, las investigaciones de Himmler y Wirth en el descubrimiento de runas de una antigua civilización en las que se inspiró Tolkien para su obra -y que hace un cameo-, y algunas otras pequeñas historias de personajes secundarios.

En la segunda, Hinos está habitado por numerosas razas: elfos, humanos, gnomos, enanos, grongis, trolls (quien se haya leído la trilogía El fin de la quinta época sabrá de lo que hablo), que viven en una fina paz. La cuestión es que Hitler ve en los elfos la raza aria y hará lo posible para, sino conquistar la Tierra, al menos conquistar Hinos con la misma ideología. En esta parte se suceden numerosas historias de personajes de todas las razas y que tendrán una importancia capital en la novela.

A pesar de ser un libro cortito, su complejidad es increíble. Jorge, su autor, ha sido capaz de crear no solo un universo de personajes, sino dos, en poco más de 340 páginas. Pero ahí no se ha quedado, sino que además nos regala al inicio de cada tema una serie de fragmentos que pueden ser tanto reales como de su propia invención y, por si fuese poco, al final del libro también muestra una serie de historias y curiosidades sobre todo lo que rodea la novela. Es decir, que el trabajo de investigación histórica que lleva esta novela de fantasía es digno de aplauso.

Y si encima se le suma la relación de la obra de Tolkien junto a elementos de sus anteriores libros y creaciones nuevas, y la crítica social (daño a la naturaleza, falta de compañerismo, egoísmo, machismo, con una especial mención al racismo, por supuesto) presente en todas sus obras, estamos ante una de las novelas de fantasía más completas que he leído.



—El que puedes ver— intervino Cel. Todos los miraron con expresión de alegría, combinada con algo de aflicción. Él, después de haber descorrido la manta, se quedó mirando hacia la parte baja de cama, observando el lugar donde tenía la sensación de que le estuvieran aplastando una pierna, la zona donde deber haber estado esta—. Ahora siento un miembro que ni siquiera tengo. Pero, por si os lo preguntáis, no me arrepiento de lo ocurrido. No dudé, elegí no asesinar a un niño empujado por los actos de unos malos padres. Esa hubiera sido mi muerte, me habría devorado por dentro.

Dada la cantidad tan sumamente grande de personajes que hay, no puedo poner aquí nada sobre ellos de forma individual. Sí decir que cada personaje es único y perfectamente definido, salvo la típica sorpresa de cobarde que se transforma en valiente. Esta riqueza de personajes es algo que me encanta, porque si bien el escenario tiene importancia, las relaciones entre los personajes y sus acciones son el eje de la novela.

Podría poner quien es mi personaje favorito, pero como son varios, mejor no. Eso sí, a más de uno se le coge mucho asco -o al menos eso me ha pasado-.

Y así mismo, referente a esto es el único punto negativo -si se puede llamar así- que le pongo a la novela. He echado en falta un glosario que diga a qué raza y facción pertenece cada personaje. Porque al inicio sí es fácil seguirlos, pero hay partes en las que la cantidad de figurantes en liza es tal que es fácil perderse. Y hombre, no es lo mismo que le corten una pierna al herrero humano que al guerrero gnomo.

Es una novela sumamente ágil, con una narración clara y concisa, sin irse por las ramas ni rizar el rizo, con una evidente evolución respecto a su primera obra. Hay escenas más explicativas y otras que son una vorágine de acción ininterrumpida, impidiendo abandonar el libro. Cuando más se lee, más cuesta dejarlo.

Eso sí, hay que estar atento a sus páginas, ya que, como explica el autor al inicio, los saltos entre historias pueden ser tanto temporales como de escenario, y pueden aparecer personajes a priori muertos después.

Como conclusión, una interesante no, interesantísima novela que puede encandilar tanto a adolescentes ávidos de fantasía, acción y peleas como a los amantes de los ambientes de la II Guerra Mundial. Una novela de mezcla arriesgada que ha quedado, desde mi punto de vista, espectacular.