Salimos de la habitación con pantalones cortos, hice 3 pasos, miré el cielo y decidí volver a ponerme unos largos. Urón no se unió a mi decisión y sería algo que lamentaría el resto del día. El cielo estaba muy gris, cargamos camperas impermeables y una campera de jogging y salimos.
Entre las idas y vueltas se nos había hecho tarde, cargamos unos café con leche en los mugs y compré un croissant relleno de queso, en realidad eso fue lo que pensé que había comprado. Cuando el chico me pregunta si quería bacon, claramente dije que si. Resulto ser que lo amarillo de la foto no era queso, sino huevos revueltos. No me quejo de mi error, estaba buenísimo. Aprovechamos a comerlo mientras hacíamos la fila en la parada de bus.
Durante el control de bolsos habitual en el ingreso al parque, el guardia nos escucha hablar y nos reconoció como argentinos. Nos comentó que conocía a Messi pero el no entendía nada de fútbol, que admiraba mucho a Manu Ginobili. Coincidimos con el señor, Manu nos parece un genio y un deportista excelente.
Arrancamos por Ellen’s Energy Adventure. Cuando ingresas, luego de una breve película de unos 10 minutos, sale un cast member a decirte que la atracción es larga y que si queres retirarte ese es el momento porque después no vas a poder salir. Me parece más que correcta la advertencia porque es una atracción laaaarga. Empieza con Ellen en los 90’s. Nos encanta Ellen y me parece lo mejor de la atracción. Recorres la historia de la energía y eso es todo, de aventura la atracción solo tiene el título. Si van con peques puede ser muy aburrida y en momentos muy oscura. Definitivamente no la repetiríamos.
Al salir de allí teníamos Fast Pass para Mission Space. Aquí se pueden elegir dos experiencias: una más tranquila, la verde, y una en que se siente más la gravedad, la naranja.Habíamos leído muchos relatos al respecto, y la mayor parte de la gente coincidía en que la naranja los hacía descomponer, sólo un grupo de valientes opinaban que la naranja y la verde para ellos eran iguales.
Dado que recién arrancábamos el día y con el esfuerzo que hicimos para estar ahí, decidimos no arruinarnos el día e ir a la verde. En el juego te distribuyen en equipos de 4 personas, las 2 señoras que iban con nosotros estaban asustadísimas, entonces le preguntaban a una nena del equipo de al lado que re canchera les respondía que era re tranquila que no se preocupara. La nena comentó que había hecho la versión naranja un montón de veces y que nunca le había pasado nada.
Al subir a cada persona se le da un rol y se simula alunizaje. la atracción está muy buena y en la verde no sentimos nada desagradable, sin embargo al salir, la cantidad de gente descompuesta que venía de la naranja nos sorprendió. Mucha gente mareada y vomitando, claramente no haremos la naranja NUNCA! La salida de esta atracción da a una especie de centro de entrenamiento donde tanto grandes como chicos pueden jugar con las misiones que propone, estaban todos los puestos de entrenamiento ocupados así que seguimos de largo.
Haga click para ver el pase de diapositivas. Aprovechando para terminar esa zona, hicimos Test Track. Acá tuvimos 1 hora de espera, una locura. Tanto Test Track como Soarin tenían estas esperas irrisorias para la época de temporada baja en que estábamos. Para este juego puso mucha plata Chevrolet y esto genera que en el camino se puedan disfrutar de una buena exposición de concept cars y algunos diseños de motor especiales. Nos llamó mucho la atención de lo novedoso que les parecía que un auto usara tanto nafta como gas, cuando en Argentina es de lo más común.
Haga click para ver el pase de diapositivas. La fila no terminaba más, por suerte hay wifi como en todos los parques y nos pusimos a revisar mails y demás yerbas que uno en vacaciones no hace muy seguido. Así se fue pasando la espera y llegamos a la parte donde te diseñas tu auto. Le metimos de todo y terminó quedando super recargado. Podías poner la magic band o tarjeta para luego bajarte el diseño, la verdad es que nunca nos preocupamos por ver desde dónde se hacía.
Finalmente, llegamos al juego en sí. Te suben a autos con 2 filas de 4 y te llevan a hacer el test drive del auto que diseñaste. La verdad que está muy buena la atracción, llega a levantar altas velocidades, pero no me pareció que valiera la pena semejante espera.
Al salir, nuevamente mucha inversión de Chevrolet en una exposición de autos de lujo muy buena. Fotito obligada y a seguir viendo los autos y camionetas, si no me falla la memoria hasta podías comprar ahí mismo un vehículo. Capitalismo 100%.
Haga click para ver el pase de diapositivas. Encaramos para el lado de Innoventions, estaba lleno de gente y nos agarró hambre así que a buscar lugar para comer. La verdad que de EPCOT no tenía tanta info de lugares Quick como del resto de los parques, como nos gusta la comida mexicana fuimos a probar suerte a La Cantina de San Angel. Sinceramente nos decepcionó bastante, encima mientras almorzábamos había unos pájaros re atrevidos que se te subían a la mesa y te robaban los nachos. No repetiremos este lugar, no nos pareció para nada bueno y las porciones mucho más chicas que en otros lugares.
Justo al terminar de almorzar se larga a llover, nos refugiamos en la pirámide del Pabellón de México. Recorrimos las tiendas e incluso nos cruzamos a Donald con el sombrero mexicano, un genio! También hicimos el paseo en botecito de la historia de los tres caballeros, para descansar las piernas y divertirse un rato está bárbaro, si están apurados ni se metan.
Haga click para ver el pase de diapositivas. Así termina nuestra primer parte recorriendo EPCOT, en la próxima entrega recorremos los pabellones de los países y las zonas “The Land” y “The Seas”.
Y después de todo, ¿Quién nos quita lo viajado? Saludos!