La bandera arcoíris se ha convertido en un símbolo queer desde que el diseñador Gilbert Baker la popularizara en 1978. La bandera originaria diseñada por Baker constaba de ocho franjas –la rosa representaba la sexualidad; la roja, la vida; la naranja, la salud; la amarilla, la luz del sol; la verde, la naturaleza; la turquesa, la magia y el arte; la azul, la serenidad y la violeta, el espíritu– aunque, apenas un año más tarde, el diseño fue reducido a seis colores, eliminando la franja rosa y la turquesa.
Cuarenta años después de que la bandera multicolor se irguiese como un símbolo de la comunidad LGBTQ+, la comunidad da muestras de que los seis colores del emblema actual no son suficientes para representar la diversidad de un movimiento que se ha extendido a todos los rincones del planeta. Y por esta razón, el diseñador norteamericano Daniel Quasar ha propuesto rediseñar la bandera del Orgullo para representar los intereses de toda la comunidad queer. Quasar ha presentado una propuesta de bandera más inclusiva y la ha llamado "la bandera del progreso". La bandera propuesta por Quasar incluye los colores de la bandera trans, así como rayas negras y marrones que representan las identidades queer y trans de las personas de color. Estos dos colores también representan a las personas que viven con VIH / SIDA, las que han fallecido a causa del virus y el estigma general que rodea a la enfermedad.
"Cuando se rediseñó la bandera para incluir las rayas negras y marrones, y las líneas trans incluidas este año, me propuse investigar si podría hacerse más énfasis en el diseño de la bandera para darle mayor significado. La sección principal de la bandera incluye los 6 colores tradicionales de la bandera LGBTQ. Las rayas representativas de las comunidades trans y comunidades queer marginadas se han colocado en el lateral que iza la bandera, en forma de flecha que indica hacia la derecha, representando el progreso y el camino que todavía queda por recorrer. Quasar lanzó una campaña en Kickstarter para poder financiar los costes iniciales de la producción. Y los resultados no se hicieron esperar, ya que en poco tiempo prácticamente consiguió doblar la cantidad inicial necesaria para poder financiar su proyecto de diseñar y producir una bandera todavía más inclusiva y diversa. El diseño de Quasar intenta integrar todo el alcance de todas las personas queer y trans, destacando historias multifacéticas dentro de la comunidad, el camino que se ha avanzado, pero también el que falta por recorrer.