Los mejores destinos para este tipo de turismo son los entornos rurales y las localidades medias y pequeñas. No hace falta perdernos en mitad de la sierra para conseguirlo, ya que en ciudades sin mucha aglomeración también se puede conseguir.
Nos vamos de turismo a Salamanca
Salamanca es una de esas ciudades que se puede visitar de manera relajada. Con algo menos de 150.000 habitantes y una parte importante de población estudiantil, estamos ante una ciudad vitalista con mucho que ofrecer.
Qué ver en Salamanca
En salamanca nos podemos perder por sus calles y visitar sus monumentos más emblemáticos a pie en su mayoría.
El monumento más conocido de la ciudad es la Catedral Nueva (ya que también existe la catedral vieja) construida entre los siglos XVI y XVIII con su campanario de 110 metros de altura.
Nos daremos un paseo por la Plaza Mayor, uno de los centros neurálgicos de la localidad, ideal para tomarnos algo en alguna de sus terrazas y disfrutar de las vistas.
Otra de las visitas típicas y obligadas es la Casa de las Conchas, un palacio gótico que tiene su fachada decorada con conchas.
Como hemos comentado, el espíritu de esta forma de viajar es perdernos por las calles de la ciudad y aprovechar para comer en sitios donde ofrezcan comida casera.
Aprovechando que nos encontramos en la ciudad de Salamanca vamos a recomendar un par de escapadas para conocer 2 bonitos pueblos y degustar su gastronomía:
La Alberca
La Alberca es un municipio de unos 1000 habitantes situado en la comarca de la Sierra de Francia y que fue el primer pueblo en recibir el título de Conjunto Histórico Artístico. Con una arquitectura muy típica no vas a parar de hacer fotografías en su Plaza Mayor y por sus intrincadas callejuelas.Miranda del Castañar
Otro pueblo de la comarca con un encanto especial. Seguimos con una arquitectura muy típica de la zona donde destacamos diferentes enclaves que podemos visitar, todos muy cerquita entre ellos para visitarlos a pie: el Castillo, principal atractivo del pueblo, la Muralla, la Ermita, la Iglesia Parroquial o la Alhondiga. También tienes la oportunidad de hacer una ruta circular de unos 11 kilomentros con una dificultad media-baja llamada Camino de los Prodigios y que comienza y termina en el mismo Miranda del Castañar.Gastronomía Típica
En cualquiera de las localidades que hemos hablado podemos aprovechar para degustar su gastronomía típica. Si quieres encontrar los mejores restaurantes de cada zona donde comer de manera saludable os recomendamos visitar la página Dónde Comer Sano y realizar una búsqueda.Vamos a enumerar algunos de estos platos que tienes que probar en tu escapada: Patatas Meneas, un guiso de patatas con carne, Carne de Morucha o ternera, Lentejas de Armuña, Hornazo, una empanada con productos de la zona como lomo, chorizo o jamón y Chanfaina, otro de los platos típicos de estas localidades.
Como hemos visto, este es un ejemplo de una escapada donde tenemos mucho que ver y que hacer, pero que tenemos la oportunidad de hacerlo de manera relajada, sin estrés ni aglomeraciones y disfrutando de comidas típicas y sanas.